El viaje de Selva, la valiente niña

En un pequeño pueblo llamado Arroyo Alegre, vivía una niña llamada Selva. Selva era una niña intrépida, llena de curiosidad y con una mente exploradora. Le encantaba recorrer los rincones del bosque cercano a su casa, descubriendo plantas, animales y tesoros escondidos.

Un día, mientras exploraba el bosque, Selva se encontró con un antiguo árbol gigante. Al acercarse, escuchó una voz suave que parecía susurrar su nombre. Sorprendida, Selva descubrió que el árbol tenía vida propia y podía comunicarse con ella. El árbol le contó sobre un mundo mágico y misterioso al que solo los valientes podían acceder. Selva, emocionada, decidió emprender un viaje hacia ese mundo desconocido.

Equipada con una mochila llena de provisiones y su determinación, Selva se adentró en el bosque, siguiendo las indicaciones del árbol. En su camino, se enfrentó a desafíos como cruzar precipicios, sortear densos bosques y superar pruebas de astucia. Con valentía y creatividad, logró superar cada obstáculo.

Finalmente, llegó a un claro en el bosque donde se encontró con un ser mágico conocido como el Guardián del Mundo Verde. El Guardián elogió la valentía de Selva y le concedió el honor de convertirse en la protectora del bosque. A partir de ese día, Selva asumió su rol con orgullo, velando por la protección y preservación de la flora y fauna del bosque.

Desde entonces, Selva enseña a otros niños y niñas la importancia de cuidar y respetar la naturaleza. Su valentía y determinación la convirtieron en un ejemplo para todos, demostrando que el amor por la naturaleza y la valentía pueden marcar la diferencia en el mundo.