El viaje de Sofía y la estrella perdida
Sofía era una niña curiosa y valiente que siempre soñaba con vivir aventuras emocionantes. Un día, mientras miraba las estrellas desde su ventana, vio una estrella muy brillante que parpadeaba y parecía estar perdida. Decidida a ayudarla, Sofía se puso su abrigo, agarró su linterna y salió corriendo hacia el bosque.
Al adentrarse en el oscuro bosque, Sofía escuchó un suave susurro que la llamaba. Siguiendo el sonido, se encontró con un simpático búho llamado Olegario. "¿Qué haces por aquí, pequeña exploradora?" preguntó el búho con curiosidad. "Estoy buscando una estrella perdida para ayudarla a encontrar su camino de regreso al cielo", respondió Sofía con determinación.
Olegario se ofreció a guiar a Sofía a través del bosque, contándole historias sobre las estrellas y enseñándole a utilizar su linterna para iluminar el camino. Juntos atravesaron ríos, subieron montañas y esquivaron troncos caídos, hasta que finalmente llegaron a un claro donde la estrella aún parpadeaba débilmente.
Sofía extendió su mano hacia la estrella y, con un toque de magia, la envolvió en su luz. La estrella, agradecida, brilló con fuerza y comenzó a elevarse lentamente hacia el cielo. Sofía sonrió con alegría, sabiendo que había cumplido su misión.
De regreso a casa, Olegario le dijo a Sofía: "Has demostrado ser una valiente y generosa amiga de las estrellas. Recuerda siempre que, incluso en la oscuridad, tu luz interior puede guiarte hacia grandes logros".
Sofía asintió con determinación, segura de que siempre llevaría consigo la luz de la amistad y la valentía en su corazón.
FIN.