El Viaje de Timi al Mundo Interior
Había una vez un pequeño títere de madera llamado Timi, que vivía en un hermoso parque lleno de flores de colores, árboles frondosos y una encantadora fuente en el centro. Timi era un títere curioso, siempre preguntándose cómo era el mundo interior que llevaba dentro.
Un día, mientras los niños jugaban a su alrededor, Timi decidió que era hora de un gran aventura. "¡Voy a descubrir lo que hay en mi mundo interior!"- exclamó, emocionado. Con un pequeño salto, se alejó de su lugar en el parque y se adentró en un bosque cercano.
Al caminar, Timi se encontró con una mariposa de brillantes colores. "¡Hola, Timi! ¿A dónde vas tan apresurado?"- preguntó la mariposa.
"Voy a descubrir mi mundo interior!"- respondió Timi, lleno de entusiasmo.
"Eso suena interesante. Pero ten cuidado, hay lugares en el interior que pueden ser un poco confusos. ¡Te puedo ayudar!"- dijo la mariposa.
Timi sonrió y continuó su camino junto a su nueva amiga. Después de un rato, llegaron a un gran árbol con un tronco muy ancho y un pasadizo que parecía llevar a un lugar secreto.
"¿Vas a entrar, Timi?"- preguntó la mariposa.
"¡Claro! Me muero de curiosidad"- respondió Timi, con los ojos llenos de brillo.
Dentro del árbol, se encontró en un mundo de colores y formas sorprendentes. Había nubes de algodón de azúcar, ríos de jugo de frutas y colinas que cantaban canciones de alegría. Todo era maravilloso, y Timi no podía creer lo que veía.
Pero, de repente, algo oscuro apareció entre las nubes. Era una nube gris que absorbía todo el color a su alrededor.
"Yo soy la Nube de la Duda"- dijo la nube, con una voz profunda. "Vengo a sembrar confusión en tu viaje. ¿Acaso crees que podrás descubrir la verdad sobre ti mismo?"-
Timi sintió un escalofrío recorrer su madera.
"Pero yo quiero conocerme mejor, y no dejaré que la duda me detenga!"- respondió Timi con valentía.
La mariposa, volando alrededor de la nube, dijo: "No estás solo, Timi. Juntos podemos enfrentar a la nube. Recuerda todo lo hermoso que has visto. ¡Ese es tu verdadero poder!"-
De repente, Timi sintió un cálido destello en su corazón. Recordó sus momentos felices, las risas de los niños en el parque, las flores que le sonreían y todos los colores que lo rodeaban.
Con esa fuerza, Timi avanzó hacia la Nube de la Duda.
"No me dejes nublar mi mente. Yo soy valiente, soy curioso y no temo a conocerme. ¡Te enfrentaré!"-
La nube gris comenzó a temblar. "¿Qué sabes tú de mí?"- preguntó, un poco intimidada.
"Sé que solo eres un espejismo. Si te enfrento, tu oscuridad se disolverá en luz"- replicó Timi.
La nube gris, sintiendo el valor de Timi y la luz de la mariposa, comenzó a desvanecerse.
Con un último estallido de luz brillante, Timi y la mariposa lograron deshacerse de la nube.
"¡Lo logramos!"- gritó Timi, mientras el arcoíris comenzaba a aparecer, llenando el cielo de nuevos colores.
"¡Eso es! Ahora puedes seguir explorando tu mundo interior"- dijo la mariposa feliz.
Timi siguió explorando y descubrió más sobre sí mismo: sus pasiones, sus sueños y muchas más amistades en ese mágico lugar. Comprendió que todos tienen dudas a veces, pero lo importante es enfrentarlas con valentía.
Al final del día, Timi regresó a su rincón en el parque, donde los niños lo estaban esperando.
"¿Dónde te habías metido, Timi?"- preguntó una niña.
"¡Tuve una aventura increíble! Ahora sé que mi mundo interior es un lugar donde puedo ser valiente y aprender sobre mí mismo cada día"- respondió Timi con una gran sonrisa.
Y así, el pequeño Timi se convirtió en un maestro de su propio corazón, sabiendo que cada emoción era una parte de su verdadero ser. Y cada vez que alguien dudaba en el parque, Timi les contaba su historia para inspirarlos a ser valientes y explorar su propio mundo interior.
FIN.