El viaje del amor
Había una vez, en un reino muy lejano, una princesa llamada Florencia. Era hermosa y tenía muchos pretendientes, pero ninguno lograba hacerla feliz. Por eso, decidió emprender un viaje para conocer el mundo.
Florencia recorrió montañas, ríos y bosques. Conoció gente de diferentes culturas y aprendió muchas cosas nuevas. Pero a pesar de todo lo que vivió, seguía sintiéndose sola. Un día, mientras caminaba por el campo, se topó con un príncipe llamado Agustín.
Era apuesto y fuerte como ningún otro hombre que había conocido antes. Al verlo, Florencia sintió algo especial dentro de ella. "Hola princesa ¿Te encuentras bien?"- preguntó Agustín al ver a la princesa tan perdida en sus pensamientos.
"Sí estoy bien gracias" -respondió Florencia sonriendo tímidamente. Desde ese momento comenzaron a hablar cada vez que se encontraban en su camino hacia algún destino nuevo. Florencia no podía evitar sentirse cada vez más enamorada del príncipe azul.
Pero no todo era felicidad para la princesa ya que algunos de sus ex novios celosos intentaban hacerle daño en su largo camino por el mundo sin embargo Agustin siempre estaba ahí para protegerla.
Con el tiempo llegaron a un pueblo donde decidieron quedarse juntos durante unos días más largos que los anteriores a causa del cansancio acumulado luego de tanto viajar.
Durante ese tiempo pudieron conocerse mejor y descubrieron que compartían muchos gustos e intereses similares además ambos aman los perros. "¿Quieres ser mi esposa, princesa Florencia?"- preguntó Agustín arrodillándose frente a ella con un anillo de compromiso en mano. Florencia no podía creer lo que estaba pasando.
Había encontrado al hombre perfecto para ella y él la amaba tal como era. Así que aceptó encantada su propuesta y se casaron en una gran ceremonia rodeados de sus amigos más cercanos y familiares.
Juntos vivieron felices por siempre y tuvieron tres hijos maravillosos y tres perros que los acompañaban a todas partes. La princesa Florencia finalmente encontró el amor verdadero y aprendió que no hay nada más importante que estar rodeado de personas que te quieren tal como eres.
FIN.