El viaje del camión de emociones
En una ciudad lejana, había un camión muy especial. No era un camión común y corriente, sino un camión mágico que transportaba emociones por todo el mundo. Este camión tenía la habilidad de recoger las emociones de las personas y llevarlas a donde más se necesitaran.
Un día, el camión se despertó con una carga muy pesada. La tristeza de un niño que había perdido su pelota, el desagrado de una niña por su cena y la furia de un hombre que había tenido un mal día se habían acumulado en el camión. Pero el camión sabía que su misión era transformar esas emociones en algo positivo.
El camión decidió iniciar un viaje para ayudar a las personas a encontrar la felicidad. En su camino, encontró a un niño que tenía miedo de empezar en una nueva escuela. El camión se acercó lentamente y le susurró: "- No tengas miedo, todo va a salir bien. La nueva escuela será maravillosa y encontrarás nuevos amigos." El niño sonrió, sintiendo un poco de alivio en su corazón.
El camión continuó su viaje y se topó con una chica triste que había perdido a su gatito. Con una voz suave, el camión le dijo: "- No te preocupes, seguro que tu gatito regresará pronto. Mientras tanto, puedes recordar los buenos momentos que pasaron juntos." La chica asintió, sintiendo un poco de consuelo.
Finalmente, el camión llegó a un pequeño pueblo donde la gente estaba desanimada por la sequía. El camión liberó toda su carga de emociones transformadas y, de repente, la gente comenzó a sentir esperanza y alegría.
El camión había logrado su misión, enseñando a todos que las emociones difíciles pueden convertirse en algo bueno. Desde ese día, el camión prometió seguir su viaje, llevando felicidad a cada rincón del mundo.
FIN.