El Viaje del Pequeño To Be

Había una vez un pequeño verbo llamado To Be que vivía en el mágico mundo de las Palabras. To Be era un verbo especial porque podía transformarse y adaptarse a muchos momentos en la vida. El sol brillaba sobre el hermoso bosque donde vivía, y era un día perfecto para aprender algo nuevo.

Un día, mientras To Be caminaba por el bosque, se encontró con un grupo de sustantivos emocionados.

"¡Hola, To Be! ¡Estamos organizando una fiesta! ¿Vendrás?" dijo un sustantivo llamado Cat (gato).

"¡Claro que sí! Me encantaría ir," respondió To Be con una sonrisa.

Cuando llegaron a la fiesta, hubo música y juegos. Cada sustantivo tenía algo especial que mostrar. Cat presentó a su amigo Dog (perro).

"¡Este es Dog! Él es muy divertido y siempre está listo para jugar!" dijo Cat.

"¡Hola Dog! ¡Es genial conocerte!" dijo To Be.

To Be se dio cuenta de que en cada presentación, los sustantivos lo utilizaban de forma diferente. Al principio, se sintió un poco confundido.

"¿Por qué dicen, 'I am a Cat' y luego 'You are a Dog'?" preguntó To Be.

Los sustantivos sonrieron y le explicaron. Cat dijo:

"Tú eres el puente entre nosotros. Así podemos decir quiénes somos. ¡Eres muy importante!"

"Sí," agregó Dog, "Tu magia está en cómo te transformas. A veces eres 'am' para mí, y otras eres 'are' para Cat y los demás."

To Be se sintió emocionado y un poco orgulloso. Sin embargo, de repente, una nube oscura apareció en el cielo. El viento sopló fuerte, y los juegos fueron interrumpidos.

"¡Oh no! ¿Qué es eso?" gritó Dog, asustado.

"¡Es una tormenta!" dijo Cat.

"¡Debemos encontrar un refugio!" agregó To Be.

Quickly, todos comenzaron a correr hacia un árbol grande, donde podían protegerse de la lluvia. To Be se dio cuenta de que necesitaba ser un poco más fuerte en ese momento.

"¡No se preocupen! Estoy aquí para ayudar. ¡Vamos a contar hasta diez y a ver cómo podemos ayudarnos!"

Mientras contaban, los sustantivos comenzaron a sentir mejor.

"Yo AMO este lugar, siempre será nuestro refugio," dijo Cat, comenzando a sentirse más seguro.

"Y nosotros somos amigos, ¡eso es lo importante!" dijo Dog.

La razón por la que To Be era especial se empezó a volver clara. En todos esos momentos difíciles, era el apoyo que necesitaban sus amigos.

"¡Nosotros estaremos OK!" dijo Dog.

Después de un rato, la tormenta pasó y el sol volvió a brillar.

"Mirá, ¡hay un arcoíris!" gritó Cat con alegría.

"¡Sí! Esto es maravilloso," exclamó To Be. "¡Ahora, ¿podemos volver a la fiesta?"

Todos rieron y volvieron a la fiesta.

"Gracias, To Be, por ser tan valiente y siempre estar con nosotros," dijo Dog.

"¡Eres perfecto tal como eres!" agregó Cat.

Y así, To Be aprendió que ser él mismo, era lo que realmente importaba. El pequeño verbo se dio cuenta de que cada forma tenía su propio poder y que juntos, podían superar cualquier cosa. A partir de ese día, continuaron explorando el mundo de las Palabras, siempre listos para aventuras y emocionantes lecciones.

Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.