El viaje del tren de los números

Había una vez en el país de los números, un tren mágico que recorría las tierras llevando a los números de viaje. El tren estaba compuesto por vagones de diferentes colores, cada uno con un número pintado en su puerta.

Un día, el número 3 subió al tren y se encontró con el número 7 en el primer vagón. -¡Hola número 7! -saludó el número 3. -¡Hola número 3! ¿Quieres jugar a contar los vagones juntos? -propuso el número 7.

Juntos, los números contaron los vagones de colores que veían pasar por la ventana, practicando su habilidad para contar.

Pasaron por un bosque de árboles con hojas de diferentes formas y colores, donde el número 5 se les unió para seguir contando. Luego atravesaron un río con patos de colores, y el número 2 se unió al juego. Los números reían y se divertían mientras aprendían a contar en su viaje en tren.

De repente, el tren se detuvo frente a un gran puente. -¡Oh no! El puente está roto y necesita ser reparado -exclamó el maquinista. -¿Cómo podemos cruzar el puente ahora? -preguntó preocupado el número 3. -¡Tengo una idea! -dijo el número 7.

-Podemos unir nuestras fuerzas y formar una cadena para llegar al otro lado. El número 2, que era el más pequeño, se colgó del número 3, seguido por el número 5 y el número 7, formando una cadena humana.

Con esfuerzo y trabajo en equipo, lograron cruzar el puente y continuar su viaje. Finalmente, llegaron a la ciudad de los números, donde fueron recibidos con alegría por todos los demás números.

El número 3, el número 7, el número 5 y el número 2 se dieron cuenta de que juntos, podían superar cualquier obstáculo y que las matemáticas eran divertidas y emocionantes. Y así, el tren de los números continuó su viaje, llevando a los números a nuevos destinos llenos de aprendizaje y diversión.