El viaje estelar de Isaías y Ángel

Isaías y Ángel eran dos amigos inseparables que siempre soñaron con viajar al espacio. Un día, mientras miraban las estrellas desde el jardín de Isaías, vieron una luz brillante que descendía del cielo y aterrizaba en el patio trasero.

- ¡Wow! ¿Qué será eso, Isaías? - preguntó Ángel emocionado. Isaías se acercó lentamente a la extraña luz y descubrió que era una nave espacial brillante y reluciente.

Una escalera se desplegó desde la nave y una voz suave dijo: "¡Bienvenidos, Isaías y Ángel! Los hemos estado esperando". Los dos amigos se miraron asombrados y sin dudarlo un segundo, subieron a la nave espacial.

Una vez adentro, fueron recibidos por seres extraterrestres amigables que les explicaron que habían sido elegidos para acompañarlos en un viaje especial por el universo. - ¡Esto es increíble! - exclamó Isaías con los ojos llenos de asombro. La nave despegó suavemente y comenzaron su travesía por el espacio exterior.

Vieron planetas desconocidos, nebulosas coloridas y estrellas fugaces brillantes. Los extraterrestres les enseñaron sobre la importancia de cuidar el planeta Tierra y respetar el universo.

- Debemos ser buenos guardianes de nuestro hogar en el espacio - les dijo uno de los extraterrestres con sabiduría. Isaías y Ángel aprendieron mucho durante su viaje cósmico. Descubrieron la belleza infinita del universo y comprendieron lo frágil que es nuestro planeta en comparación con la inmensidad del cosmos.

Finalmente, la nave los llevó de regreso a casa sanos y salvos. Cuando pisaron tierra firme nuevamente, se abrazaron felices por haber vivido esa increíble aventura juntos. - ¡Nunca olvidaremos este viaje al espacio! - exclamó Ángel con emoción.

Desde ese día, Isaías y Ángel compartieron su experiencia con todos sus amigos e inspiraron a muchos a cuidar nuestra Tierra como si fuera el tesoro más preciado del universo.

Y cada noche, cuando miraban las estrellas desde el jardín de Isaías, recordaban con cariño aquel mágico viaje al espacio que cambió sus vidas para siempre.