El viaje fantástico de Quiriquí
Había una vez en un bosque encantado, un simpático quiquiriquí llamado Quiriquí. Él vivía en una casita pequeñita, pero soñaba con conocer el mundo exterior.
Un día, Quiriquí decidió emprender un viaje sin igual. Se despidió de sus amigos, los cuquiriquíes, y se puso en marcha. En su travesía, conoció a Quiriquina, una mariposa muy curiosa que lo acompañaría en su aventura. Juntos, recorrieron valles, montañas y bosques, siempre atentos a los sonidos mágicos que la naturaleza les regalaba.
-Querida Quiriquina, ¿qué es lo que más te gusta de nuestro viaje? -preguntó Quiriquí con curiosidad.
-La quietud de los lagos y el susurro de las hojas al caer, ¡me encanta! -respondió Quiriquina emocionada.
Pero su travesía no estuvo exenta de peligros. En una cueva oscura, se encontraron con el cuquiriquín, un pequeño ratoncito que estaba perdido y asustado. Sin dudarlo, Quiriquí y Quiriquina lo ayudaron a encontrar el camino de regreso a su casa.
Finalmente, después de muchas aventuras, llegaron a la cima de la montaña más alta. Allí, contemplaron el hermoso paisaje y se prometieron seguir explorando juntos.
Y así, Quiriquí descubrió que el mundo exterior era tan maravilloso como había imaginado, pero lo que realmente hacía especial ese viaje era tener a Quiriquina y al cuquiriquín a su lado para compartirlo.
Y colorín colorado, este cuento de Quiriquí y sus amigos ha terminado.
FIN.