El vuelo de la amistad



En la escuela, Mariana y Carol eran las mejores amigas. Siempre estaban juntas y se divertían mucho en el recreo. Un día, mientras jugaban en el patio, vieron a un niño nuevo que parecía estar triste y solo.

"Mira, Carol, ese niño parece necesitar un amigo", dijo Mariana preocupada. Carol asintió y ambas decidieron acercarse al niño para hacerle compañía. Descubrieron que su nombre era Lucas y que acababa de mudarse a la ciudad.

"Hola Lucas, somos Mariana y Carol. ¿Quieres jugar con nosotras?" -preguntó cariñosamente Mariana. Lucas miró sorprendido pero luego sonrió tímidamente. —"Claro" , respondió emocionado. Desde ese día, los tres se volvieron inseparables.

Jugaban juntos todos los días durante el recreo e incluso comenzaron a pasar tiempo después de la escuela. A medida que pasaba el tiempo, Mariana notó algo peculiar en Lucas: siempre llevaba una caja pequeña consigo donde guardaba cosas misteriosas.

Un día, mientras jugaban en el parque cercano a sus casas, Mariana decidió preguntarle sobre esa caja. "Lucas ¿qué hay dentro de esa cajita? Siempre la llevas contigo". Lucas titubeó por un momento antes de abrir la caja y mostrarles su contenido: eran mariposas vivas.

"Me encantan las mariposas", dijo Lucas con entusiasmo. "Siempre las atrapo para poder observarlas más de cerca". Mariana y Carol quedaron impresionadas por la dedicación de Lucas hacia las mariposas.

Le pidieron que les enseñara cómo atraparlas y cuidarlas adecuadamente. A partir de ese día, los tres amigos pasaron sus tardes en el parque, aprendiendo sobre diferentes tipos de mariposas y cómo cuidarlas.

Se convirtieron en expertos en el tema e incluso comenzaron a dar charlas a otros niños sobre la importancia de conservar la naturaleza. Un día, mientras daban una charla en su escuela, Mariana notó algo triste en Lucas. "¿Qué te pasa, Lucas?" -preguntó preocupada. Lucas suspiró.

"Mis papás me dijeron que nos mudaremos nuevamente", confesó con tristeza. "No quiero dejarlos ni dejar de ver las mariposas". Mariana y Carol se miraron y supieron que tenían que hacer algo para ayudar a su amigo.

Decidieron organizar una despedida sorpresa para Lucas y recolectar fondos para comprarle un libro especializado sobre mariposas. El día de la despedida llegó y todos los compañeros de clase se reunieron en el patio de la escuela.

Mariana y Carol le entregaron a Lucas el libro mientras todos los demás le daban abrazos cálidos y palabras llenas de cariño. "Nunca te olvidaremos, Lucas" dijo Mariana con lágrimas en los ojos. "Siempre serás nuestro amigo especial".

Lucas sonrió emocionado mientras guardaba su nuevo libro junto con sus preciadas mariposas en su caja especial. Aunque se tuvo que ir, sabía que siempre tendría un lugar especial en el corazón de Mariana y Carol.

Con esta experiencia, Mariana y Carol aprendieron la importancia de ser amables y solidarios con los demás. Descubrieron que la amistad verdadera puede superar cualquier obstáculo y que siempre hay algo valioso en cada persona, incluso si es diferente a nosotros.

Y así, Mariana y Carol continuaron su camino en la escuela, recordando siempre la maravillosa aventura que vivieron junto a su amigo Lucas.

FIN.

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