El vuelo del perdón
Había una vez un hermoso bosque en el que vivían muchos animales. Entre ellos se encontraban Zorro Budy y Rana Black, dos amigos inseparables que siempre estaban juntos explorando y divirtiéndose.
Un día, mientras jugaban cerca de un río, Zorro Budy decidió gastarle una broma a Rana Black. Se acercó sigilosamente por detrás y le hizo cosquillas en la barriga. Rana Black se asustó y saltó tan alto que cayó al agua.
Rana Black salió furiosa del río y le reclamó a Zorro Budy: "¡No es justo! Me asustaste tanto que caí al agua. No deberías jugar conmigo de esa manera".
Zorro Budy, sorprendido por la reacción de su amiga, respondió: "Lo siento mucho, no pensé que te asustarías tanto. Solo quería hacer una broma". Rana Black estaba muy molesta y decidió alejarse de Zorro Budy para evitar más problemas. Ambos se quedaron tristes por la pelea y el distanciamiento entre ellos.
Los días pasaron y el bosque ya no era lo mismo sin la risa ni las travesuras de Zorro Budy y Rana Black juntos. Otros animales notaron su ausencia e intentaron mediar entre ellos para solucionar sus diferencias.
Un grupo de pájaros sabios fue en busca de Rana Black para hablar con ella. Le dijeron: "Amigos como ustedes son muy difíciles de encontrar en este bosque mágico. Entendemos tu enfado, pero también creemos que todos cometemos errores alguna vez".
Rana Black reflexionó sobre las palabras de los pájaros sabios y decidió darle una segunda oportunidad a Zorro Budy. Se acercó a él con cautela y le dijo: "Escucha, Zorro Budy, creo que ambos cometimos errores.
Me asustaste mucho, pero también me di cuenta de cuánto te extraño cuando no estás cerca". Zorro Budy, emocionado por las palabras de su amiga Rana Black, respondió: "Tienes razón, cometí un error al gastarte esa broma pesada.
Lamento haberte lastimado y prometo no volver a hacerlo". Ambos se abrazaron y prometieron cuidarse mutuamente en el futuro. Juntos regresaron al bosque y contaron a todos los animales que habían arreglado sus diferencias.
Desde aquel día, Zorro Budy y Rana Black siguieron siendo inseparables. Aprendieron la importancia del respeto y la empatía en una amistad verdadera. El bosque volvió a ser un lugar lleno de risas y diversión gracias a la reconciliación entre estos dos amigos tan especiales.
Todos los animales aprendieron que es posible superar las peleas y solucionar problemas si hay voluntad de perdonar y entender al otro.
Y así fue como Zorro Budy y Rana Black demostraron que incluso después de una pelea, una amistad puede florecer más fuerte que nunca antes. Fin
FIN.