Emma y su maravillosa aventura con su muñeca
Emma era una niña muy linda, con ojos azules como el cielo y cabello rubio como los rayos del sol. Ella tenía una adorada muñeca llamada Lola, con la que compartía todas sus aventuras.
Un día, mientras paseaban por el jardín, Emma y Lola se encontraron con una mariposa muy especial. -¡Mira, Lola, qué bonita mariposa! -exclamó Emma con entusiasmo. La mariposa, al oír a Emma, se posó en su mano y comenzó a hablar.
-Hola, soy Marisol, la mariposa viajera. Tengo un secreto que contarte, Emma. Lola también puede oírme. Emma y Lola se quedaron sorprendidas. Marisol les explicó que tenía el poder de llevarlas a un lugar mágico si confiaban en la amistad y el amor.
Sin dudarlo, Emma tomó la mano de Lola y la de la mariposa, y en un abrir y cerrar de ojos, se encontraron en un hermoso bosque encantado. Allí, conocieron a seres mágicos como hadas y duendes.
Juntos, vivieron emocionantes aventuras y aprendieron la importancia de la amistad, la solidaridad y el respeto por la naturaleza. Después de un día lleno de diversión, Marisol llevó a Emma y Lola de regreso a casa.
Emma abrazó a su muñeca con cariño, agradecida por haber vivido una aventura tan maravillosa. Desde ese día, Emma aprendió que la magia está en todas partes, solo hay que creer en ella y en el poder de la amistad.
Y Lola siempre estuvo a su lado, lista para compartir nuevas aventuras juntas.
FIN.