En busca de la felicidad
Había una vez en el tranquilo pueblo de San Telmo, una pequeña niña llamada Ana, quien siempre estaba en busca de la felicidad.
Un día, su abuelita le contó una vieja leyenda sobre un mágico árbol de la felicidad que se encontraba en lo más profundo del bosque. Según la leyenda, aquel que lograra encontrar el árbol y recoger una de sus brillantes hojas, encontraría la felicidad eterna.
Sin dudarlo un segundo, Ana decidió emprender un viaje hacia el bosque en busca de tan ansiado tesoro. Durante su travesía, conoció a un simpático zorro llamado Tito, que se unió a su aventura. Juntos atravesaron ríos, escalaron montañas y sortearon obstáculos, siempre con optimismo y valentía.
Finalmente, después de muchas peripecias, llegaron al centro del bosque donde se alzaba majestuoso el árbol de la felicidad. "¡Mira, Tito, lo encontramos!" exclamó Ana emocionada.
Con cuidado, tomó una de las hojas del árbol y en ese instante sintió una cálida paz invadir su corazón. De regreso al pueblo, Ana descubrió que la verdadera felicidad no reside en tesoros materiales, sino en compartir momentos especiales con amigos y seres queridos.
Desde entonces, ella y Tito se convirtieron en los mejores amigos y contagiaban su alegría a todos los habitantes de San Telmo, demostrando que la verdadera felicidad está en el camino, no en el destino.
FIN.