En busca de Mamá Zorra



En un pequeño pueblo rodeado de montañas vivía Valiente Ari oso, un osito muy curioso y valiente que siempre estaba en busca de aventuras.

Un día, mientras exploraba el bosque, se encontró con Tito, un simpático zorrito que estaba perdido y asustado. "Hola, ¿estás bien?", preguntó Valiente Ari oso con amabilidad. "No sé dónde estoy, me separé de mi mamá", respondió Tito con tristeza.

Valiente Ari oso sintió compasión por el pequeño zorrito y decidió ayudarlo a encontrar a su mamá. Juntos recorrieron el bosque, siguiendo las huellas que Tito recordaba haber visto antes de perderse.

En su camino, se toparon con la Bruja Honesta Castillo, una bruja diferente a las demás porque siempre decía la verdad y ayudaba a quienes lo necesitaban. "¿Pueden ayudarme? Estoy buscando a la mamá de Tito", explicó Valiente Ari oso.

"Claro que sí, déjenme ver en mi bola mágica", respondió la Bruja Honesta Castillo mientras consultaba sus hechizos. Después de unos minutos de concentración, la bruja les indicó el camino hacia donde se encontraba la mamá de Tito.

Agradecidos por su ayuda, Valiente Ari oso y Tito continuaron su travesía hasta llegar a una cueva donde finalmente encontraron a la mamá del pequeño zorrito. "¡Mamá!", exclamó Tito emocionado al reencontrarse con ella. "Gracias por traerlo sano y salvo", dijo la mamá de Tito abrazando a Valiente Ari oso.

El osito sonrió feliz al ver reunida a esa familia y supo en ese momento que había hecho algo bueno ayudando a su nuevo amigo.

La Bruja Honesta Castillo los observaba desde lejos con una sonrisa en el rostro, contenta de haber podido colaborar en esa hermosa historia de amistad y solidaridad.

Desde ese día, Valiente Ari oso, Tito y la Bruja Honesta Castillo se convirtieron en grandes amigos y juntos vivieron muchas más aventuras ayudando a quienes lo necesitaban en el pueblo y más allá. Y así demostraron que no importa cuán diferentes sean las personas (o animales) si trabajan juntas pueden lograr grandes cosas y hacer del mundo un lugar mejor para todos.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!