En Busca de Su Mejor Amigo
Había una vez en un vecindario lleno de árboles y flores, un perrito llamado Toby. Toby era un perro pequeño, de pelaje marrón y orejas caídas. Su mejor amigo era Lucas, un niño travieso de diez años. Juntos compartían aventuras en el parque, jugaban a la pelota y se hacían compañía mutuamente.
Un día, Lucas se mudó a otra ciudad porque su papá había conseguido un nuevo trabajo. Toby no lo sabía, pero se despertó esa mañana y no encontró a su amigo en casa. Solitario y confundido, Toby decidió que tenía que encontrar a Lucas, así que salió a la aventura.
- “No puedo quedarme aquí solo, ¡tengo que buscar a Lucas! ” - se dijo Toby con determinación.
Toby corrió hacia el parque, pero no había rastro de su amigo. Mientras olfateaba el aire, se encontró con una tortuga llamada Carla.
- “Hola, Toby. ¿Por qué tan triste? ” - preguntó Carla.
- “Estoy buscando a mi mejor amigo, Lucas. Se ha ido y no sé dónde está.”
- “Tal vez pueda ayudarte. He visto a un niño con una gorra roja jugando cerca de la estación de tren. Quizás sea él.” - sugirió Carla.
Toby se sintió emocionado y agradeció a Carla antes de salir disparado hacia la estación de tren. Al llegar, encontró a muchos niños jugando, pero ninguno era Lucas.
Desconcertado, Toby se sentó en una esquina, sintiéndose triste y cansado. Justo en ese momento, un labrador llamado Max se le acercó.
- “¿Por qué estás tan cabizbajo, amigo? ”
- “Estoy buscando a mi mejor amigo que se ha mudado. Me dijeron que pudiera encontrarlo aquí, pero no está.”
- “No te preocupes, creo que puedo ayudarte. Todos los niños pasan por la plaza del centro, vamos allí.” - dijo Max alegremente.
Toby se sintió esperanzado de nuevo y juntos emprendieron camino hacia la plaza. Al llegar, el bullicio de los niños jugando llenaba el aire. Pero todavía no había señales de Lucas.
De repente, un globo rojo voló por el aire y se posó justo al lado de Toby. En ese momento, un niño con una gorra roja corrió a atraparlo. Era Lucas.
- “¡Lucas! ” - ladró Toby, saltando de alegría.
Lucas se detuvo y miró a su alrededor, sonriendo al ver a su mejor amigo.
- “¡Toby! No puedo creer que estés aquí. Te extrañé tanto.”
Los dos se abrazaron, llenos de felicidad por estar juntos de nuevo.
- “¿Cómo me encontraste? ” - preguntó Lucas, rascando la cabeza de Toby.
- “Salí a buscarte. Me dijeron que pudieras estar aquí, y aunque no estaba seguro, no me rendí.” - respondió Toby.
Lucas sonrió.
- “Eso es lo que hacen los amigos, siempre se buscan. Te prometo que siempre estaré cerca, incluso si estoy lejos. Siempre puedes volver a encontrarme.”
Desde ese día, Toby y Lucas aprendieron que a pesar de la distancia, la amistad verdadera siempre encuentra la manera de mantenerse. Y así, Toby regresó a casa lleno de alegría y cariño, sabiendo que la amistad es un lazo que nunca se rompe.
A partir de entonces, Toby y Lucas comenzaron a tener aventuras aun más grandes, explorando juntos el mundo, con la promesa de que nunca se perderían el uno al otro nuevamente.
FIN.