En busca del Gran Árbol de los Deseos



Había una vez en la sabana africana una jirafa llamada Lola y una lagartija llamada Leo. A pesar de ser muy diferentes, eran amigos inseparables y compartían grandes aventuras juntos.

Un día, mientras caminaban por la sabana, Lola se quejó de lo aburrida que era su vida: "Siempre hago lo mismo, comer hojas altas y caminar por aquí y allá. Me gustaría hacer algo emocionante". Leo sonrió con picardía: "Yo sé exactamente qué podemos hacer para divertirnos.

¿Has oído hablar del Gran Árbol de los Deseos?""¿El Gran Árbol de los Deseos? No", dijo Lola con curiosidad. "Sí, es un árbol mágico donde puedes pedir cualquier deseo que quieras", explicó Leo.

Lola estaba entusiasmada: "¡Vamos a buscarlo!"Así comenzó su aventura hacia el Gran Árbol de los Deseos. Durante el camino, tuvieron que sortear muchos obstáculos como ríos caudalosos y leones hambrientos.

Pero gracias a la astucia de Leo y al largo cuello de Lola para ver a lo lejos, lograron superar cada uno. Finalmente llegaron al árbol mágico pero se encontraron con un problema inesperado: solo había dos frutos mágicos disponibles para pedir deseos. Y ambos querían uno.

"No te preocupes Lola", dijo Leo amablemente. "Tú has sido mi mejor amiga durante mucho tiempo así que te daré el fruto mágico para que pidas tu deseo". Pero Lola no quiso aceptarlo: "No, Leo. Tú también mereces pedir un deseo.

¿Por qué no compartimos el fruto?"Leo sonrió agradecido y así lo hicieron. Cada uno tomó una mitad del fruto mágico y pidió su deseo.

Lola pidió más aventuras emocionantes en su vida, mientras que Leo pidió la capacidad de correr más rápido para poder ayudar a sus amigos en situaciones peligrosas.

Al regresar a casa, Lola descubrió que la verdadera emoción estaba en tener amigos leales como Leo, y que cada día era una aventura cuando se compartía con alguien especial. Y Leo aprendió que siempre hay formas de ayudar a tus amigos sin importar tus limitaciones físicas.

Así termina la historia de Lola y Leo, dos amigos muy diferentes pero muy unidos gracias al valor de la amistad sincera.

FIN.

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