Estrellita en busca de la luna
Había una vez en el cielo nocturno una pequeña estrellita llamada Estrellita, que brillaba con fuerza pero que anhelaba algo más en su vida.
Todas las noches, Estrellita observaba a la hermosa luna y soñaba con acercarse a ella, pero parecía imposible. Un día, decidió emprender un viaje en busca de la luna. "Luna, luna, ¿cómo haces para brillar tan alto en el cielo?", preguntó Estrellita con entusiasmo.
La luna le respondió con amabilidad: "Estrellita, para brillar así, debes creer en ti misma y seguir tu propio camino. No tengas miedo de brillar con luz propia". Animada por las palabras de la luna, Estrellita decidió lanzarse al viaje.
En su travesía, conoció a las estrellas fugaces que la ayudaron a encontrar el camino y a atravesar desafíos. Con valentía y determinación, Estrellita enfrentó obstáculos como las nubes oscuras y los vientos fuertes. Con cada desafío superado, su luz se hacía más fuerte.
Finalmente, Estrellita llegó muy cerca de la luna y descubrió que su brillo se había vuelto tan radiante como el de la propia luna. "Estrellita, has logrado brillar con tu propia luz y has encontrado el camino hacia mí", dijo la luna con orgullo.
Estrellita entendió que su viaje no había sido en vano; había descubierto su verdadero poder y belleza. A partir de ese momento, Estrellita siguió brillando con fuerza en el cielo, inspirando a otras estrellitas a creer en sí mismas y perseguir sus sueños.
Y así, cada noche, el cielo se iluminaba con el brillo de Estrellita, recordándonos que todos tenemos la capacidad de brillar con luz propia.
FIN.