Estrellita y el secreto del mar



En una hermosa playa de aguas cristalinas y arena dorada, vivía una pequeña estrella de mar llamada Estrellita. Ella compartía su hogar con muchos otros animalitos marinos que nadaban en las pozas entre las rocas.

Todos eran amigos y se cuidaban mutuamente. Un día, un grupo de niños llegó a la playa para disfrutar del sol y el mar. Entre ellos había dos hermanitos muy curiosos, Martín y Sofía.

Al ver a Estrellita y a sus amiguitos en las pozas, los ojitos de los niños brillaron emocionados. "¡Mira Sofi, qué linda estrella de mar! ¡Quiero llevármela a casa en mi cubito!", exclamó Martín emocionado.

Sofía asintió con entusiasmo, sin darse cuenta del peligro que eso implicaba para Estrellita y sus amigos. Los niños intentaron atrapar a Estrellita con sus manos, pero ella se movía rápidamente tratando de escapar. "¡No nos quiere dejar agarrarla!", dijo Martín frunciendo el ceño.

Estrellita miró a los niños con tristeza y les explicó:"Por favor chicos, no puedo irme contigo en ese cubito. Esta es mi casa junto a mis amigos. Si me llevas lejos de aquí, moriré porque necesito el agua del mar para vivir".

Martín y Sofía se quedaron sorprendidos al escuchar las palabras de Estrellita. Nunca habían pensado en cómo se sentirían los animalitos al ser sacados de su hábitat natural. "Lo siento mucho Estrellita, no queríamos hacerte daño", dijo Sofía apenada.

Los niños reflexionaron sobre lo que habían estado haciendo y decidieron pasar el resto del día observando a los animales marinos en su ambiente natural, sin intentar llevárselos.

Mientras tanto, algo inesperado sucedió: un cangrejo gigante apareció en la playa amenazando con destrozar las pozas donde vivían Estrellita y sus amigos. Los animales entraron en pánico sin saber qué hacer. Estrellita recordó cómo los niños la intentaron llevarse antes y tuvo una idea brillante.

Se acercó nadando velozmente hacia Martín y Sofía e hizo señas para que la siguieran. "¿Qué pasa Estrellita?", preguntó Martín intrigado. Sin decir nada más, Estrellita guió a los niños hasta la poza más grande donde vivían todos los animalitos marinos.

Con rapidez les indicó cómo podían ayudarlos usando piedras para construir un muro protector que impidiera al cangrejo entrar allí. Martín y Sofía entendieron el mensaje de Estrellita e inmediatamente comenzaron a recolectar piedras junto con otros visitantes de la playa.

Trabajaron juntos construyendo un muro alto y sólido alrededor de la poza para protegerla del peligroso cangrejo. Cuando terminaron, todos celebraron haber salvado el hogar de Estrellita y sus amigos gracias al trabajo en equipo entre humanos y animales marinos.

Desde ese día, los niños aprendieron a respetar la vida silvestre del mar y nunca más intentaron llevarse un animalito como mascota.

La historia corrió como reguero por toda la costa enseñándole a cada niño que pasaba sobre lo importante que es respetar la vida marina. Y así fue como Estrellita se convirtió en la heroína no solo por salvar su hogar sino por concientizar sobre lo valioso que es respetarlo.

Y colorin colorado este cuento ha concientizado sobre cuidar nuestro planeta formando parte desde pequeños haciéndolos responsables también del futuro.

FIN.

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