Femboy y la lección del respeto
Femboy era un niño travieso y curioso que siempre metía la nariz donde no debía. Un día, mientras jugaba en el armario de su madre, encontró un bikini muy bonito y decidió probárselo.
Sin embargo, en ese momento, su madre entró en la habitación y lo encontró con su bikini puesto. Sorprendida y molesta, su madre decidió darle una lección a Femboy.
- '¡Femboy, eso no está bien! No debes tomar las cosas de los demás sin permiso', le reprendió su madre. Como castigo, lo llevó a la cocina y le pidió que lavara los platos durante una semana para reflexionar sobre su comportamiento.
Femboy aprendió que es importante respetar las pertenencias de los demás y que las acciones tienen consecuencias. Desde ese día, se esforzó por ser más considerado y respetuoso. Su madre, orgullosa de su cambio, le enseñó a pedir permiso antes de tomar algo que no le perteneciera.
Así, Femboy entendió que la lección del respeto era valiosa y necesaria para convivir en armonía con los demás.
FIN.