Freddy y la Aventura en el Zoológico



Era un hermoso día soleado cuando Freddy, un niño curioso y aventurero, decidió que era el momento perfecto para ir al zoológico. Su mamá le había prometido que lo llevaría si sacaba buenas notas en la escuela, y Freddy había trabajado muy duro para conseguirlo. Con su mochila llena de una merienda deliciosa, se despidió de su mamá y salió corriendo hacia la puerta.

Al llegar al zoológico, su rostro se iluminó al ver la entrada llena de colores brillantes y emocionantes. "¡Mirá, mamá!"- gritó emocionado, apuntando a los carteles de los animales. La mamá de Freddy sonrió y le dijo: "¡Vamos, Freddy! Tenemos un mundo de aventuras por descubrir."

Mientras recorrían el zoológico, Freddy estaba fascinado por cada animal que veía. Los leones, los elefantes, las jirafas y los pingüinos le parecían criaturas mágicas. Sin embargo, en un momento, se detuvieron frente a la jaula de un orangután que lucía triste y solitario.

"Mamá, ¿por qué el orangután parece tan triste?"- preguntó Freddy con preocupación.

"A veces, los animales en los zoológicos extrañan su hogar, porque están acostumbrados a vivir en libertad. Pero aquí tienen cuidado y comida"- explicó su mamá.

Freddy pensó por un momento y luego dijo: "Creo que deberíamos hacer algo por él, mamá. Debemos hacer que se sienta mejor"-.

Su mamá se sorprendió por la sensibilidad de Freddy. "¿Y qué proponés?"- le preguntó.

"Podríamos contarle historias o hacerle dibujitos. A algunos niños les gusta escuchar cuentos"- sugirió Freddy, entusiasmado.

"¡Esa es una gran idea! Hoy por la tarde, haremos un dibujo para el orangután"- respondió su mamá con una sonrisa.

Después de seguir explorando el zoológico, Freddy y su mamá se encontraron con un grupo de niños que tenían un taller de arte. "¡Hola!"- les saludó Freddy, "¿Quieren ayudarnos a dibujar algo especial para un orangután triste?"- Los niños se miraron entre ellos y asintieron felices.

Así que se reunieron todos alrededor de una mesa y comenzaron a dibujar. Algunos hacían dibujos de frutas y otros de los árboles en los que viven los orangutanes. Mientras dibujaban, Freddy escuchó que algunos niños hablaban sobre los animales en peligro de extinción.

"¿Qué significa eso?"- preguntó Freddy a un niño que se llamaba Lucas.

"Eso significa que hay pocos de esos animales, y si no hacemos algo, podrían desaparecer"- respondió Lucas.

"Pero, ¿podemos hacer algo?"- insistió Freddy, con el corazón lleno de inquietud.

"Podemos ayudar a cuidar el medio ambiente, reciclar, y hablar con nuestros amigos y familiares sobre la importancia de proteger a los animales"- dijo Lucas, mientras terminaba su dibujo.

Freddy se sintió inspirado y dijo: "Entonces, a partir de hoy, voy a ser un defensor de los animales. Haré carteles en mi casa y le contaré a todos sobre los orangutanes y cómo cuidarlos"-.

Cuando terminaron sus dibujos, apilaron los papeles coloridos y se acercaron a la jaula del orangután. Freddy levantó un dibujo y lo mostró con orgullo. "Este es para vos, amigo"-, dijo, sonriendo.

El orangután miró curiosamente y, para sorpresa de todos, se acercó a la reja. Luego, tomó el dibujo con sus manos y se lo llevó cerca de su pecho. Todos los niños comenzaron a aplaudir.

"¡Mirá, Freddy! Creo que le gusta"- dijo la mamá de Freddy.

"¡Sí! ¡Lo hace!"- replicó Freddy emocionado.

Ese día, Freddy no solo aprendió sobre los animales y su bienestar, sino que también entendió la importancia de cuidar de su hogar, la Tierra. Al regresar a casa, su corazón estaba lleno de felicidad.

"Mamá, prometo que siempre haré algo para ayudar a los animales y la naturaleza, incluso en mi propia ciudad"- dijo con determinación.

"Esa es una hermosa promesa, Freddy. Estoy muy orgullosa de vos"- le respondió su mamá mientras lo abrazaba.

Y así, Freddy, con la ayuda de sus nuevos amigos, se convirtió en un verdadero defensor de los animales, siempre buscando formas de cuidar del planeta y crear conciencia sobre la situación de los animales en peligro. Aquella aventura en el zoológico, no solo había sido un día de diversión, sino también el inicio de una misión muy especial.

FIN.

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