Fuego, el héroe del bosque

Había una vez un dragón llamado Fuego, que vivía en la tierra fantástica de los seres mágicos. Fuego era diferente a los demás dragones, ya que no le gustaba quemar cosas y volar por el cielo.

Él prefería caminar por el bosque y jugar con los animales. Un día, mientras jugaba con sus amigos los conejos, Fuego se encontró con un grupo de hadas tristes. Al verlas así, decidió acercarse para preguntarles qué les pasaba.

"¿Qué les sucede chicas? ¿Por qué están tan tristes?" - preguntó Fuego preocupado. "Es que nuestro bosque está siendo atacado por unos malvados gigantes y no sabemos cómo detenerlos", respondieron las hadas llorando.

Fuego pensó en lo mucho que quería a su hogar y en lo feliz que había sido allí. Decidió ayudar a las hadas a salvar el bosque de cualquier peligro. Así que se ofreció para enfrentarse a los gigantes.

Cuando llegaron al lugar donde estaban los gigantes, estos empezaron a reírse al ver al pequeño dragón parado frente a ellos:"¡Mira! ¡Un pequeño reptil quiere pelear contra nosotros! Jajaja".

Pero Fuego no se dejó intimidar y comenzó a luchar contra ellos usando su astucia e inteligencia. Logró distraerlos para permitir que las hadas pudieran lanzar polvo mágico sobre ellos y así debilitarlos.

Finalmente, gracias al coraje del valiente dragón y la ayuda de sus amigos mágicos, lograron vencer a los gigantes y salvar el bosque. Desde ese día, Fuego se convirtió en un héroe para todos los seres mágicos de la tierra fantástica. Los animales lo admiraban por su valentía y las hadas nunca olvidarían todo lo que hizo por ellas.

Fuego aprendió que no importa cuán diferente seas o si te sientes fuera de lugar, siempre puedes hacer algo bueno por los demás. Y así, vivió feliz en su hogar junto a sus amigos mágicos.