Futbol galáctico
Hace mucho tiempo, en una galaxia muy, muy lejana, los personajes de Star Wars decidieron jugar un partido de fútbol contra un equipo de niños del planeta Tatooine.
Los personajes estaban seguros de que ganarían fácilmente el partido, pero pronto se dieron cuenta de que estaban equivocados. El partido comenzó y rápidamente los niños tomaron la delantera. Darth Vader intentaba controlar el balón con su sable láser, pero los niños eran demasiado rápidos para él.
Luke Skywalker intentaba usar la Fuerza para mover el balón hacia la portería contraria, pero los niños lograron interceptarlo cada vez. "No puedo creerlo", dijo Han Solo mientras sudaba profusamente. "Estos mocosos nos están ganando". "Tienen mucha energía", respondió Leia Organa.
"Tenemos que encontrar una forma de detenerlos". Los personajes intentaron todo lo que pudieron para marcar goles y detener a los niños, pero nada parecía funcionar.
Cada vez que pensaban que habían encontrado una estrategia efectiva, los niños encontraban una manera de superarla. Pero entonces algo extraño sucedió: uno de los jugadores más jóvenes del equipo infantil se tropezó y cayó al suelo. Todos esperaron a ver si estaba bien antes de continuar jugando.
"¿Estás bien?", preguntó Chewbacca con preocupación mientras ayudaba al niño a levantarse. "Sí", respondió el niño sonriendo tímidamente.
En ese momento, todos los personajes se dieron cuenta de algo importante: no importaba si ganaban o perdían el partido; lo que realmente importaba era divertirse y disfrutar del juego. "Chicos, creo que nos estamos tomando esto demasiado en serio", dijo Luke. "Deberíamos estar disfrutando de este momento juntos".
Todos los personajes asintieron con la cabeza y comenzaron a jugar de una manera más relajada y divertida. Los niños también se unieron a ellos, y pronto todos estaban riendo y bromeando mientras jugaban. Al final del partido, los personajes de Star Wars perdieron contra el equipo infantil.
Pero eso no les importó en absoluto; habían aprendido una lección valiosa sobre lo importante que es disfrutar del deporte y la amistad. "Fue un gran partido", dijo Han Solo mientras se despedía de los niños.
"La próxima vez, tendremos que entrenar más duro". "Sí", respondió Leia. "Pero esta vez, creo que ganamos algo mucho más valioso: la alegría de jugar juntos". Y así terminó el partido de fútbol entre los personajes de Star Wars y el equipo infantil del planeta Tatooine.
Aunque los personajes perdieron el partido, ganaron algo mucho más importante: una nueva perspectiva sobre la vida y el deporte.
FIN.