Giovanna, Tañía y el perrito aventurero
Giovanna y Tañía eran dos amiguitas muy curiosas y llenas de energía. Un día, mientras jugaban en el parque, encontraron a un perrito callejero que parecía perdido. El cachorrito estaba asustado y tenía hambre.
Las niñas se acercaron con cuidado y le ofrecieron un poco de su merienda. El perrito, agradecido, les dio saltitos de alegría. Decidieron llevarlo a casa para cuidarlo y buscar a su dueño.
Llegaron a la casa de Giovanna y lo bañaron, le dieron de comer y lo acurrucaron en una cálida manta. Luego, salieron a recorrer el barrio para preguntar si alguien lo reconocía. Después de muchas vueltas, encontraron a una señora que lloraba desconsolada, buscando a su perrito perdido.
Las niñas corrieron hacia ella y le explicaron que lo tenían. La señora, llena de alegría, les agradeció con un abrazo y les contó que el perrito se llamaba Toby y se le había escapado.
Luego, la señora les contó a las niñas sobre la importancia de cuidar a las mascotas, de no dejarlas solas en la calle y de asegurarse de que lleven su chapita con nombre y teléfono.
Giovanna y Tañía asintieron con seriedad, entendiendo lo importante que era ser responsables con los animales. La señora les regaló un dibujo de Toby para agradecerles y les prometió llevarlas a pasear con él en el parque.
Desde ese día, Giovanna, Tañía y Toby se volvieron amigos inseparables, disfrutando de largos paseos y tardes de juegos. Aprendieron que cuidar a los animales les brindaba mucha alegría y que la responsabilidad es una muestra de amor.
FIN.