Helena y Lupe
Helena era una niña de 11 años apasionada por la danza urbana, con el poder de volar y una habilidad excepcional con el arco y la flecha.
Su hermana menor, Lupe, de 7 años, era una talentosa gimnasta que tenía el don de volar y correr a una velocidad asombrosa. Juntas, formaban un equipo extraordinario con el objetivo de combatir las injusticias cotidianas que afectaban a su barrio.
Una tarde, mientras paseaban por el parque, escucharon un llanto proveniente de un callejón. Sin dudarlo, volaron hacia el lugar y encontraron a un grupo de niños siendo intimidados por un par de matones. -Hermana, ¿vamos a ayudar? -preguntó Lupe con determinación. -¡Claro que sí! -respondió Helena, sacando su arco y flechas.
Con valentía y destreza, las hermanas enfrentaron a los matones, protegiendo a los niños indefensos. Tras una emocionante batalla, los matones huyeron, dejando atrás a los hermanos asustados y agradecidos.
Desde ese día, Helena y Lupe se convirtieron en heroínas de su barrio, enfrentando y resolviendo toda clase de injusticias que afectaban a los habitantes.
Ya fuese deteniendo robos, rescatando gatitos atrapados en los árboles, o ayudando a ancianos a cruzar la calle, las hermanas siempre estaban dispuestas a hacer el bien. Sin embargo, su valentía y bondad llamaron la atención de alguien inesperado: el temible villano conocido como el Señor Oscuro, quien planeaba sembrar el caos en la ciudad.
Decidido a detener a Helena y Lupe, el Señor Oscuro comenzó a urdir un malvado plan. Una noche, mientras las hermanas dormían, el villano atacó su hogar, cubriendo todo con una oscuridad siniestra.
Sin embargo, Helena y Lupe despertaron en medio de la noche y, sin temor, decidieron enfrentar al villano. Empuñando su arco y flechas, Helena apuntó hacia la oscuridad, mientras Lupe corría velozmente hacia el villano. -¡No permitiremos que hagas daño a nuestra ciudad! -exclamaron las valientes hermanas.
Lucharon con todas sus fuerzas, demostrando que la valentía y la determinación siempre pueden vencer a la maldad. Finalmente, lograron iluminar su hogar con la luz de la bondad, derrotando al Señor Oscuro y devolviendo la paz a la ciudad.
A partir de ese día, Helena y Lupe se convirtieron en las heroínas más admiradas y respetadas de su barrio, inspirando a otros a hacer el bien y a luchar contra las injusticias cotidianas.
Juntas, demostraron que el poder de la bondad y la valentía podía cambiar el mundo, un acto a la vez.
FIN.