Isabella y el arcoiris de la danza
Isabella era una niña muy especial, con un cabello largo y negro que brillaba como el cielo estrellado. En un día hermoso y soleado, Isabella se dirigía a su clase de ballet, emocionada por aprender nuevos pasos y movimientos.
Mientras caminaba, vio un arcoiris brillante en el cielo y sintió una gran alegría. -Wow, ¡miren ese arcoiris! ¡Es tan hermoso! - exclamó Isabella emocionada, señalando hacia el cielo.
Sus compañeras de clase también se maravillaron del arcoiris y corrieron hacia la clase de ballet, todas sonriendo y llenas de energía. La profesora de ballet, la señorita Marta, les dijo: -Hoy, mis queridas bailarinas, vamos a aprender la danza del arcoiris.
Cada una representará un color y juntas crearemos una maravillosa danza llena de magia y alegría. Isabella estaba emocionada por la propuesta y se esforzó al máximo para representar el color negro, ya que su cabello era de ese color.
Durante la clase, las niñas aprendieron a moverse con gracia y armonía, representando los colores del arcoiris con sus movimientos. Al final de la clase, la señorita Marta les dijo: -Hoy demostraron que juntas pueden crear algo maravilloso, al igual que los colores del arcoiris se unen para pintar el cielo.
Cada una de ustedes es especial y única, pero juntas forman un equipo increíble. Isabella entendió que la diversidad es hermosa y que trabajar en equipo puede crear cosas maravillosas.
Desde ese día, Isabella apreciaba aún más su cabello largo y negro, sabiendo que era parte de su singularidad. Siempre recordaba la danza del arcoiris y la lección de que todos, siendo diferentes, podían unirse para crear algo especial.
FIN.