Jandri y su mejor amigo el gato
Jandri era un niño curioso y aventurero que vivía en un pequeño pueblo rodeado de naturaleza. Un día, mientras paseaba por el bosque, se encontró con un gato callejero.
El gato, con ojos brillantes y pelaje gris, se acercó a Jandri y comenzó a restregarse cariñosamente contra sus piernas. Jandri, asombrado por la amabilidad del gato, decidió llevarlo a casa. Desde ese día, el gato se convirtió en su inseparable compañero. - '¿Cómo deberíamos llamarte, amigo?' preguntó Jandri.
El gato simplemente ronroneó en respuesta. Jandri decidió llamarlo Pelusa, debido a lo suave y esponjoso que era su pelaje. Jandri y Pelusa se volvieron inseparables, compartiendo travesuras, juegos y largas siestas bajo el sol.
Una tarde, mientras exploraban un viejo molino abandonado, escucharon un débil maullido proveniente del interior. Intrigados, se adentraron en el oscuro molino y descubrieron a una gata atascada entre algunas tablas. Pelusa se acercó con cuidado y la ayudó a liberarse.
La gata, agradecida, les contó que estaba buscando a sus pequeños gatitos perdidos y les pidió ayuda. Jandri y Pelusa, sin dudarlo, se ofrecieron a ayudarla. Juntos recorrieron el bosque, rastreando los pequeños maullidos hasta encontrar a los gatitos escondidos en un viejo tronco hueco.
La gata, llena de alegría y agradecimiento, los abrazó con cariño. Desde ese día, Jandri, Pelusa y la gata se convirtieron en una gran familia, compartiendo sus días juntos y cuidándose mutuamente.
La valentía y amabilidad de Jandri y Pelusa demostraron que la ayuda y la amistad pueden cambiar vidas y unir a diferentes seres en una hermosa historia de compañerismo.
FIN.