Jesús y la bola rápida de la amistad

Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Esperanza, un niño llamado Jesús. Jesús era muy especial, ya que tenía autismo.

A pesar de sus dificultades para comunicarse y socializar, Jesús tenía un gran sueño: jugar al béisbol y tener muchos amigos. Un día, mientras caminaba por el parque del pueblo, Jesús vio a un grupo de niños jugando al béisbol. Se acercó tímidamente y les preguntó si podía unirse a ellos.

"¿Puedo jugar con ustedes?", preguntó Jesús con una sonrisa tímida en su rostro. Los niños lo miraron sorprendidos al principio, pero luego uno de ellos dijo:"¡Claro! ¡Todos son bienvenidos a nuestro equipo!"Jesús no podía creerlo.

Finalmente iba a poder cumplir su sueño de jugar al béisbol y tener amigos. Desde ese día, se convirtió en parte del equipo y practicaba todos los días después de la escuela. Con el tiempo, Jesús demostró ser un excelente jugador.

Tenía un increíble talento para atrapar la pelota y lanzarla con precisión. Los otros niños quedaron impresionados por sus habilidades y pronto se convirtieron en sus amigos más cercanos.

Un día, el equipo de béisbol de Villa Esperanza tuvo un importante torneo contra el equipo de la ciudad vecina. Todos estaban nerviosos, pero sabían que podían confiar en Jesús para ayudarlos a ganar. Durante el juego, el equipo estaba perdiendo por una carrera y solo quedaba una entrada por jugar.

Era el turno de Jesús para batear y tenían la esperanza puesta en él. Concentrado y decidido, Jesús golpeó la pelota tan fuerte que logró anotar dos carreras decisivas para ganar el juego.

Todos los niños corrieron hacia él para celebrar la victoria. "¡Eres increíble, Jesús! ¡Gracias por ser parte de nuestro equipo!", exclamaron los niños emocionados. Jesús sonrió ampliamente mientras abrazaba a sus amigos.

Había cumplido su sueño de jugar al béisbol y tener muchos amigos que lo querían tal como era. Desde ese día en adelante, Jesús siguió jugando al béisbol con su equipo y siempre recordaría que los verdaderos amigos están ahí para apoyarte sin importar las dificultades que puedas enfrentar en la vida.