Jorge el oso valiente

Jorge era un osito muy bueno y cariñoso, pero tenía un problema: le daba mucho miedo ir a la escuela.

Todos los días, cuando llegaba la hora de salir de casa, Jorge se escondía bajo la cama y le decía a su mamá que no quería ir. - Mamá, no quiero ir a la escuela, tengo mucho miedo, decía Jorge con carita triste.

- ¿Por qué tienes miedo, mi osito? La escuela es un lugar donde puedes aprender, jugar con tus amigos y divertirte, respondía su mamá con voz suave. Pero Jorge no encontraba consuelo y seguía negándose a ir. Un día, su mamá le dio una gran idea. Escuchame, Jorge.

Si te animas a ir a la escuela, te prometo que al regreso haremos tu actividad favorita juntos. La idea entusiasmó a Jorge, quien decidió enfrentar su miedo y finalmente se dispuso a ir a la escuela.

Al llegar, se dio cuenta de que todos los animalitos lo recibieron con alegría y lo trataron con amabilidad. Poco a poco, Jorge empezó a disfrutar de las clases, de los juegos, y sobre todo, de la compañía de sus nuevos amigos.

Al regresar a casa, Jorge estaba muy contento y le recordó a su mamá la promesa que le había hecho. Mamá, hoy fui a la escuela y me divertí mucho. Ahora quiero jugar contigo, dijo Jorge sonriente.

Así que mamá y Jorge pasaron la tarde jugando a las escondidas, su juego favorito. Desde ese día, Jorge dejó de tener miedo de ir a la escuela y comprendió que a veces, enfrentar nuestros miedos nos puede llevar a vivir grandes aventuras y momentos especiales con los que nos rodean.