José y sus hermanos
Había una vez en la tierra de Canaán, un niño llamado José. José era el hijo más joven de su familia y le encantaba soñar despierto. Un día, José tuvo un sueño especial y decidió contárselo a sus hermanos.
- '¡Chicos, tuve un sueño increíble! Vi que estábamos en el campo y nuestras gavillas se inclinaban ante la mía', les dijo emocionado.
Sus hermanos, un poco celosos, le respondieron: - '¡Tú y tus sueños locos!' Un tiempo después, José tuvo otro sueño y esta vez les contó a todos: -'Soñé que el sol, la luna y once estrellas se inclinaban ante mí'. Sus hermanos se pusieron más celosos aún y empezaron a sentir envidia de José.
Un día, su padre, Jacob, le pidió que fuera a ver cómo estaban sus hermanos cuidando las ovejas en el campo. Al verlo venir, sus hermanos tramaron un plan malvado y decidieron deshacerse de él.
- '¡Vamos a echarlo en ese pozo y diremos que una fiera se lo llevó!', conspiraron. Al final, decidieron vender a José como esclavo a unos mercaderes que pasaban por allí. José se sintió asustado y triste, pero nunca perdió la esperanza.
Fue llevado lejos de su hogar, a un lugar muy lejano. A pesar de todo, José se mantuvo fuerte y valiente, confiando en que algo bueno sucedería. Y así, al final de cuentas, José logró convertirse en un gran líder y reencontrarse con su familia.
Y aunque pasaron muchas cosas difíciles, finalmente, todos vivieron felices y en paz. Y José aprendió que, a pesar de las adversidades, siempre hay esperanza y que los sueños, tarde o temprano, pueden hacerse realidad.
FIN.