¡Juanito y el poder de compartir!
En una hermosa ciudad, vivía un niño llamado Juanito. Era un niño muy amable, pero a veces le costaba compartir sus juguetes con sus amigos. Un día, mientras jugaba en el parque con sus amigos Lucas y Martina, Juanito recibió un regalo muy especial de su abuela: una caja llena de divertidos juegos de mesa.
- ¡Guau, esto es genial! -exclamó Juanito emocionado.
- ¡Vamos a jugar todos juntos! -dijo Martina con entusiasmo.
- No, estos son mis juegos, no quiero compartirlos -respondió Juanito con tristeza.
Lucas y Martina se entristecieron al escuchar la respuesta de su amigo y decidieron ir a jugar a otra parte del parque. Juanito se quedó solo con sus juegos, pero algo en su interior le hizo reflexionar. Recordó todas las veces que se había sentido triste cuando otros no querían compartir con él. Decidió que era hora de cambiar.
Corrió hasta donde estaban sus amigos y les dijo: - ¡Esperen! Sé que fui egoísta y no quise compartir mis juegos, pero ahora quiero hacerlo. Vamos a jugar juntos y compartir la diversión. Sus amigos lo miraron sorprendidos, pero pronto la sonrisa volvió a sus rostros. Jugaron y rieron juntos hasta que el sol comenzó a esconderse. La mamá de Juanito fue a recogerlo y quedó feliz al verlo compartir con sus amigos.
A partir de ese día, Juanito se convirtió en un gran amigo, siempre dispuesto a compartir y hacer felices a los demás. Descubrió que compartiendo no solo se multiplicaba la diversión, sino que también se fortalecían los lazos de amistad. Ahora, Juanito se sentía más feliz que nunca.
FIN.