La amabilidad de Max

Había una vez un pequeño zorro llamado Max que vivía en el bosque junto a su familia. Max era muy curioso y le encantaba explorar todo lo que encontraba a su alrededor.

Un día, mientras caminaba por el bosque, se encontró con un grupo de animales que estaban jugando juntos. Había conejos saltando, pájaros cantando y ardillas corriendo por los árboles.

Max se acercó para jugar con ellos, pero los demás animales empezaron a burlarse de él por ser diferente. Max tenía unas manchas blancas en su pelaje rojizo que hacían que se destacara del resto de los zorros. "Miren ese zorro raro", dijo uno de los conejos riéndose.

"No queremos jugar contigo", dijo otro pájaro moviendo sus alas. Max se sintió triste y solo. No entendía por qué no podía ser aceptado como los demás animales del bosque. Decidió alejarse del grupo y seguir explorando el bosque por su cuenta.

Mientras caminaba, escuchó unos gritos desesperados provenientes de un río cercano. Se acercó corriendo y vio a una pequeña nutria atrapada en una red de pesca abandonada. "Ayuda, ayuda", gritaba la nutria mientras luchaba por liberarse.

Max sabía que tenía que hacer algo para ayudarla. Usando sus habilidades de trepar árboles, logró cortar la red con sus dientes afilados y liberar a la nutria. La nutria estaba tan agradecida que comenzó a llorar lágrimas de alegría.

Ella le agradeció a Max por su valentía y amabilidad. "Eres un héroe", dijo la nutria abrazando a Max. Max se sintió tan feliz de haber ayudado a alguien en necesidad que olvidó todo sobre las burlas de los otros animales.

Él descubrió que lo que importaba no era cómo se veía, sino lo que hacía. Desde ese día, Max se convirtió en el protector del bosque y ayudaba a todos los animales necesitados sin importar quiénes eran o cómo lucían.

Los demás animales aprendieron una gran lección gracias a él y empezaron a aceptarlo como parte del grupo.

Y así, Max descubrió que ser diferente es algo especial y puede hacer una gran diferencia en el mundo si uno tiene la voluntad de ayudar y ser amable con los demás.