La amistad en Villa Arcoíris



Había una vez en un pequeño pueblo llamado Villa Arcoíris, cuatro amigas muy especiales: Juana, Feli, Jaz y Caro. Ellas eran inseparables y siempre se divertían juntas jugando y explorando el mundo que las rodeaba.

Un día, llegó a la escuela un chico nuevo llamado Roberto. Era simpático, inteligente y todas las chicas se enamoraron de él al instante.

Juana, Feli, Jaz y Caro comenzaron a competir por la atención de Roberto, lo que causó tensiones entre ellas. - ¡Roberto es mío! -exclamaba Juana. - ¡No seas egoísta, también me gusta a mí! -respondía Feli. - Yo vi primero a Roberto -decía Jaz con enojo. - Chicas, no peleen.

Todos podemos ser amigos -intervenía Caro tratando de calmar los ánimos. La disputa por el corazón de Roberto continuó durante días. Las risas y juegos entre las amigas se convirtieron en miradas celosas y palabras hirientes. Hasta que un día, Roberto les propuso algo inesperado.

- Chicas, ¿qué les parece si dejamos de pelear por mí? Creo que la amistad es mucho más importante que cualquier chico. Las palabras de Roberto hicieron reflexionar a Juana, Feli, Jaz y Caro.

Se dieron cuenta de lo tonto que había sido pelearse por alguien que recién habían conocido. Entonces decidieron hacer las paces y prometieron nunca más dejar que un chico interrumpiera su hermosa amistad.

Desde ese día en adelante, Juana, Feli, Jaz y Caro siguieron siendo inseparables. Compartían sus alegrías y tristezas, apoyándose mutuamente en todo momento. Aprendieron juntas la importancia de valorar la amistad verdadera por encima de cualquier otra cosa en el mundo.

Y así fue como estas cuatro amigas vivieron felices para siempre en Villa Arcoíris, recordando siempre aquel episodio donde aprendieron una gran lección: la verdadera amistad perdura más allá de cualquier disputa o desafío que se presente en la vida.

FIN.

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