La amistad es diversión y estudio
Al chico Tici le encantaba pasar tiempo con sus amigos jugando a la pelota y al amongas. Cada tarde, después de la escuela, se reunían en el parque para jugar y divertirse juntos.
Un día, mientras jugaban a la pelota, Tici notó que su amigo Juan parecía triste y no estaba tan animado como siempre. Cuando le preguntó qué pasaba, Juan le contó que estaba preocupado por sus calificaciones en matemáticas y temía reprobar el examen final.
Tici sabía lo importante que era estudiar y sacar buenas notas en la escuela, pero también sabía lo importante que era divertirse y tener amigos.
Así que decidió ayudar a Juan a estudiar para el examen mientras seguían jugando juntos al amongas y a la pelota. "Vamos Juan, te voy a ayudar con las multiplicaciones", dijo Tici mientras recogía la pelota del suelo.
"De verdad? Gracias Tici! No sé cómo podré aprobar sin tu ayuda", respondió Juan con una sonrisa de alivio. Así comenzaron los dos amigos una nueva rutina: después de jugar durante un rato en el parque, se sentaban bajo un árbol para estudiar juntos.
Tici explicaba las operaciones matemáticas más difíciles de una manera divertida e interesante, haciendo que Juan se divirtiera aprendiendo. Poco a poco, los dos amigos notaron cómo las calificaciones de Juan mejoraban cada vez más gracias a su esfuerzo conjunto.
Pero además de eso, descubrieron algo aún más valioso: habían fortalecido su amistad aún más. Un día decidieron celebrar todo lo logrado juntos, y organizaron una gran fiesta en el parque con todos sus amigos.
Tici preparó juegos divertidos para que todos disfrutaran, mientras Juan se encargaba de la música y la comida. Mientras jugaban juntos al amongas y a la pelota, los dos amigos se dieron cuenta de lo importante que era tener amigos que te apoyen en todo momento.
Y aunque las calificaciones eran importantes, también lo era tener tiempo para divertirse y disfrutar de los momentos felices junto a ellos. Al final del día, Tici le dio un abrazo a Juan y le dijo: "Gracias por ser mi amigo y permitirme ayudarte.
Juntos podemos hacer cualquier cosa". Juan sonrió felizmente y respondió: "Y gracias a ti aprendí que estudiar puede ser divertido si tienes un buen amigo como tú".
Desde ese día en adelante, Tici siguió jugando con sus amigos al amongas y a la pelota pero nunca olvidó lo importante que es ayudar a los demás cuando lo necesitan. Y gracias a su amistad con Juan descubrió que siempre hay espacio para aprender cosas nuevas mientras te diviertes con tus amigos.
FIN.