La Amistad Universal
Había una vez, en un pequeño pueblo de Argentina, cuatro amigos muy especiales: Pupe, Germancito, Anónimo y Kamu. Ellos eran inseparables y siempre estaban buscando nuevas aventuras para vivir.
Un día, mientras exploraban el bosque cercano a su casa, encontraron algo extraño. Era una criatura peluda y verde con grandes ojos amarillos.
Los chicos se asustaron al principio, pero cuando la criatura empezó a hablarles en un tono amable y simpático, supieron que habían hecho un nuevo amigo. La criatura les dijo que se llamaba Mounstruo Misterio Gracioso y que venía de otro planeta. Les contó que había llegado a la Tierra porque quería aprender más sobre los humanos y hacer nuevos amigos.
Pupe, Germancito, Anónimo y Kamu estaban fascinados por Mounstruo Misterio Gracioso y le preguntaron muchas cosas sobre su planeta natal. Él les enseñó cosas nuevas sobre ciencia e historia del universo. Sin embargo, no todo era alegría en el pueblo.
Había algunos niños malvados que solían molestar a los cuatro amigos por ser diferentes. Un día decidieron jugarles una broma pesada colocándoles trampas por toda la ciudad para lastimarlos sin importar las consecuencias.
Los cuatro amigos se dieron cuenta de lo importante que era defenderse juntos ante estas situaciones adversas; entonces le pidieron ayuda a Mounstruo Misterio Gracioso quien demostró tener habilidades únicas para enfrentar estos problemas gracias a sus conocimientos científicos avanzados.
Juntos trabajaron para armar trampas inteligentes contra los niños malvados. Cuando los niños intentaban lastimar a los amigos, terminaban cayendo en sus propias trampas y aprendieron la lección. Al final, todos se dieron cuenta de que ser diferentes no era algo malo.
Cada uno tenía habilidades únicas que podían ayudar a los demás. Pupe, Germancito, Anónimo y Kamu se sintieron más unidos que nunca después de su aventura con Mounstruo Misterio Gracioso.
Y así fue como aprendieron que la amistad verdadera no tiene límites ni fronteras.
FIN.