La Aventura de La Gota Beauty y Giordana
Era un día nublado en la ciudad, cuando Giordana se encontraba triste, mirando por la ventana mientras la lluvia caía sin parar. De repente, una pequeña gota de agua brilló en el cristal y, para su sorpresa, ¡comenzó a hablar!"Hola, Giordana. No tengas miedo, soy La Gota Beauty, y estoy aquí para hacerte compañía durante este día lluvioso" - dijo con una sonrisa.
Giordana, intrigada, respondió:
"¿De verdad? Pero, ¿por qué llueve tanto hoy?"
"Déjame llevarte en una aventura para que lo entiendas" - sugirió La Gota Beauty, iluminando su rostro.
En un parpadeo, Giordana se encontró en un mundo mágico, rodeada de colores y brillos que nunca había visto.
"¡Bienvenida al ciclo del agua!" - exclamó La Gota Beauty. "Aquí empezamos desde los ríos y océanos, donde el sol calienta el agua, y esta se transforma en vapor. Es el primer paso para que llueva".
Giordana miró a su alrededor, viendo cómo el sol brillaba y evaporaba el agua del mar en pequeñas burbujas.
"¡Wow! Entiendo, pero... ¿y luego qué pasa?"
"Después, el vapor de agua sube al cielo y forma nubes. Cuando estas se llenan de mucha agua, ¡es hora de que llueva!" - explicó La Gota Beauty mientras giraban y disfrutaban de un cielo lleno de nubes esponjosas.
De repente, una nube comenzó a gotear y La Gota Beauty se volvió más pequeña.
"¡Oh! ¡Soy yo!" - rió, mientras caía a la tierra. "Ahora formo parte del agua que regará las plantas y llenará los ríos."
"¿Pero no es peligroso caer así?" - preguntó Giordana, preocupada.
"¡Para nada!" - dijo La Gota con entusiasmo. "Cada gota tiene su lugar. Algunas se infiltran en el suelo, otras se escurren por los ríos, y muchas regresan al mar. Todo es parte del maravilloso ciclo del agua".
Giordana, maravillada por todo lo que estaba aprendiendo, le preguntó:
"¿Y cómo podemos ayudar a que estas gotitas sigan su camino?"
La Gota Beauty sonrió.
"¡Eso es muy importante! Debemos cuidar el agua, no desperdiciarla y mantener nuestros ríos y océanos limpios. Lo que hagamos hoy, afecta a mañana".
En ese momento, un fuerte viento sopló, y Giordana pudo ver cómo algunas gotas de agua eran arrastradas a un lugar que no conocía.
"¿A dónde van?" - preguntó asustada.
"Al océano, donde se juntarán con otras gotas y continuarán su viaje" - explicó La Gota. "También es crucial que cuidemos nuestro entorno. Si continuamos ensuciando el agua, podemos arruinar el viaje de muchas gotas hermosas".
Giordana reflexionó y dijo:
"Entonces, de ahora en más, seré responsable y ayudaré a cuidar el agua".
La Gota Beauty asintió, emocionada.
"Recuerda, cada gotita cuenta, Giordana. Si todos hacemos nuestra parte, el agua seguirá fluyendo, y nuestras plantas, animales y nosotros mismos estaremos saludables".
De repente, el viento sopló otra vez, y Giordana sintió que regresaba a su habitación. Con una sonrisa en su rostro y un nuevo entendimiento sobre el agua, le dio un útlimo vistazo a La Gota Beauty.
"Gracias por esta bella aventura. Nunca olvidaré lo que aprendí" - dijo Giordana.
"Y yo tampoco. ¡Cuidemos el agua juntas!" - respondió La Gota mientras desaparecía en una chispa de luz.
Desde ese día, Giordana se comprometió a cuidar cada gota de agua y a compartir lo que había aprendido con amigos. Sabía que cada pequeña acción podía hacer una gran diferencia en el ciclo de la vida del agua.
FIN.