La aventura de la pirámide alimentaria

Había una vez en un reino muy lejano, un grupo de amigos llamados Tomás, Sofía y Benjamín. Un día, mientras jugaban en el parque, decidieron emprender una emocionante aventura hacia la misteriosa Pirámide Alimentaria. Según la leyenda, en lo más alto de la pirámide, se encontraban los secretos para una alimentación saludable y equilibrada.

Los valientes amigos se adentraron en el bosque, enfrentando todo tipo de desafíos y peligros. A lo largo de su travesía, aprendieron la importancia de los buenos hábitos en la alimentación, como consumir frutas y verduras, cereales integrales, proteínas como carnes magras, legumbres y lácteos, y limitar el consumo de dulces y grasas.

En su camino, se cruzaron con el Astuto Azúcar, un travieso duende que intentó tentarlos con golosinas y refrescos azucarados. Pero los amigos, recordando que debían seguir la guía de la pirámide alimentaria, rechazaron sus engaños y continuaron con determinación.

Finalmente, tras superar todos los desafíos, llegaron a la cima de la pirámide. Allí, fueron recibidos por la Sabia Nutricionista, quien les enseñó la importancia de equilibrar los diferentes grupos de alimentos en cada comida, y les entregó un pergamino con la guía de la pirámide alimentaria.

Regresaron al reino con la valiosa información, y compartieron con todos los habitantes los secretos de la pirámide alimentaria. Desde ese día, en el reino, todos comenzaron a seguir una alimentación más saludable, llenando sus platos con los colores y sabores de cada grupo de alimentos, y disfrutando de mayor energía y vitalidad.

Y así, Tomás, Sofía y Benjamín demostraron que con valentía y sabiduría, es posible alcanzar una vida saludable siguiendo la guía de la pirámide alimentaria.