La Aventura de las Letras Perdidas

En un pequeño pueblo llamado Letrasville, las letras del abecedario vivían felices y alegres. Cada letra tenía su propia personalidad y trabajaban juntas para formar palabras y contar historias. Sin embargo, un día, las letras se dieron cuenta de que algunas de ellas habían desaparecido.

La primera letra en darse cuenta fue la —"A" . Ella corrió hacia la plaza del pueblo y gritó:

"¡Chicos, chicos! ¡Faltan algunas letras! ¡Tenemos que encontrarlas!"

Las demás letras se reunieron rápidamente. Estaban preocupadas, porque sin las letras que faltaban, no podrían formar palabras ni contar historias. La —"B" , que era muy valiente, dijo:

"No se preocupen, ¡nosotros las encontraremos! ¿Dónde las vieron por última vez?"

La —"C" , que era un poco miedosa, respondió:

"Creo que vi a la —"E"  cerca del río. Estaba jugando con unas flores."

Así que, decidieron ir al río. Al llegar, encontraron a la —"E"  riéndose y jugando con margaritas.

"¡Eres la única que puede ayudarnos!", le dijo la —"A" .

"¿Ayudarlos? ¿A qué?" respondió la —"E"  con curiosidad.

"Hemos perdido algunas letras y necesitamos tu ayuda para encontrarlas!" dijo la —"B" .

La —"E"  pensó un momento y dijo:

"Está bien. Pero antes, ¡quiero que me enseñen a formar una palabra con las flores!"

"¡Buena idea!" exclamó la —"A" . Así que, juntas formaron la palabra —"FLOR" . Después de divertirse un poco, la —"E"  se unió a ellas y continuaron con la búsqueda.

Mientras caminaban, escucharon un sonido extraño. Al acercarse, vieron a la letra —"G"  atrapada en un arbusto.

"¡Ayuda!" gritó la —"G" .

"No te preocupes, vamos a sacarte de ahí!" dijo la —"B" .

Con un gran esfuerzo, las letras lograron liberar a la —"G"  y, agradecida, ella les dio información valiosa.

"Vi a la —"D"  cerca del viejo árbol de la sabiduría, ¡ella se quedó allí porque quería aprender más!" dijo la —"G" .

Juntas corrieron hacia el árbol. Al llegar, encontraron a la —"D"  leyendo un libro.

"¿Por qué no nos ayudaste a buscar?" preguntó la —"A" .

"Estaba aprendiendo sobre el mundo de las palabras. ¡Pero me alegra verlas!" respondió la —"D"  entusiasmada.

"Nos falta la —"F" . ¿La has visto?" preguntó la —"B" .

"No, pero puedo ayudar a encontrarlas. ¡Leamos algo en voz alta, quizás eso ayude!"

Se pusieron a leer en voz alta, y mientras más palabras pronunciaban, más letras aparecían. Pronto, la —"F"  apareció entre los árboles, emocionada y llena de energía.

"¿Qué pasó? ¿Por qué me dejaron sola?" preguntó la —"F" .

"Nosotros no te dejamos. ¡Te estábamos buscando! Dijo la —"A" .

"Ya no importa, lo importante es que estamos juntas nuevamente", dijo la —"F" .

Las letras decidieron volver a su plaza y contarle al resto del abecedario sobre su aventura. Desde ese día, las letras aprendieron que siempre es mejor mantenerse unidas y que cada una tiene un papel importante en la formación de historias.

Al regresar al pueblo, las letras comenzaron a formar palabras y a contar historias inspiradoras sobre su búsqueda. Las demás letras escuchaban atentas, aprendiendo sobre la amistad y el trabajo en equipo.

Así, Letrasville nunca dejó de contar historias, cada letra con su propio estilo y aportando su toque único.

Y así, aprendieron que con colaboración, todo se logra, ¡incluso encontrar las letras perdidas!