La aventura de los alimentos sanos
En un lejano pueblo llamado Saborcito, vivían la lechuga, el tomate, la zanahoria, el pollo y la manzana, que eran muy buenos amigos. Juntos, formaban el equipo de los alimentos sanos y siempre se esforzaban por mantenerse libres de contaminación.
Un día, el malvado Germolín, un germen travieso, llegó al pueblo y empezó a contaminar todo a su paso. Germolín quería que todos los alimentos se enfermaran para que no pudieran ser consumidos por los habitantes del pueblo.
-¡Mwahahaha! ¡Ningún alimento se salvará de mi contaminación! -exclamó Germolín con malicia. Los alimentos sanos se dieron cuenta de que debían detener a Germolín antes de que fuera demasiado tarde.
Decidieron emprender una aventura para encontrar la forma de vencer al malvado germen. Durante su travesía, se enfrentaron a muchos desafíos, como evitar la contaminación cruzada entre los alimentos, aprender a lavarse las manos correctamente y descubrir la importancia de cocinar los alimentos a temperaturas seguras.
Con valentía y trabajo en equipo, lograron vencer a Germolín y devolver la pureza y seguridad a su pueblo.
A partir de ese día, los alimentos sanos enseñaron a todos los habitantes del pueblo la importancia de prevenir la contaminación cruzada y cuidar la higiene en la cocina. Desde entonces, Saborcito se convirtió en un lugar donde los alimentos siempre se mantenían seguros y saludables.
FIN.