La Aventura de Niña y sus Nuevos Amigos



Era un hermoso día en la ciudad, y Niña había decidido salir a jugar al parque. Mientras corría detrás de su pelota, no se dio cuenta de que se alejaba cada vez más de casa. Cuando finalmente se detuvo, se dio cuenta de que no reconocía el lugar. "Oh no, estoy perdida", dijo Niña, mirando a su alrededor con temor.

Pero justo en ese momento, un gran elefante de color azul apareció ante ella.

"¡Hola, pequeña! No te asustes, soy Elefante, el guardián de este bosque. ¿Qué te trae aquí?"

"Hola, Elefante. Estoy perdida y quiero volver a casa", respondió Niña, con la voz temblorosa.

"No te preocupes, te ayudaré a encontrar el camino. Pero primero, necesitas hacer nuevos amigos", dijo Elefante con una sonrisa.

De repente, apareció un majestuoso león amarillo.

"Yo soy León, y puedo enseñarte a ser valiente", rugió con voz profunda.

"Valiente? Pero yo tengo miedo", contestó Niña.

"Todo el mundo tiene miedo a veces. Ser valiente no es no tener miedo, sino seguir adelante a pesar de él", explicó León.

Niña se sintió un poco más tranquila.

Al mismo tiempo, una alta jirafa de manchas moradas apareció caminando con gracia.

"¡Hola! Soy Jirafa, y puedo ayudarte a mirar desde lo alto. Desde arriba, todo se ve diferente", dijo mientras estiraba su largo cuello para alcanzar las ramas de un árbol.

"¿Mirar desde lo alto? ¿Qué hay de especial en eso?", preguntó Niña.

"Cuando mires desde lo alto, podrás ver el camino y encontrar nuevas perspectivas", respondió Jirafa con dulzura.

Con la ayuda de sus nuevos amigos, Niña decidió escalar un árbol cercano con la guía de Jirafa. Desde lo alto, vio dónde estaba el parque donde había jugado.

"¡Miren! Allá está mi casa, ¡debajo de esas nubes!", exclamó.

Pero justo cuando estaba emocionada por volver, vio que había un río que debía cruzar.

"Pero no sé nadar", dijo Niña, angustiada.

León rugió suavemente para calmar su ansiedad.

"¡Yo te ayudaré! El río no es tan ancho, solo hay que tener fe y saltar entre las piedras. Puedes hacerlo", la animó.

"Pero si me caigo...", comenzó Niña.

"Si te caes, yo estaré aquí para ayudarte a levantarte. Confía en ti misma", dijo Elefante, junto a León y Jirafa, quienes le dieron apoyo.

Niña respiró hondo y, sintiendo el aliento de sus amigos a su lado, dio su primer paso.

Saltó de piedra a piedra, entre risas y gritos, hasta que finalmente llegó a la orilla.

"¡Lo logré!", gritó con alegría.

"Claro que sí, te dije que eras valiente", dijo León con orgullo.

"Y ahora puedes ver que los desafíos son más sencillos cuando tienes amigos a tu lado", añadió Jirafa.

Finalmente, llegando a la entrada del parque, Niña pudo ver la gran puerta donde su madre solía esperarla.

"Gracias, amigos. No lo hubiera logrado sin ustedes", dijo Niña, sintiéndose muy agradecida.

"Recuerda siempre, la verdadera valentía y la amistad te ayudarán a encontrar el camino, sin importar cuán perdido te sientas", dijo Elefante.

Desde entonces, Niña nunca olvidó lo que había aprendido ese día. Y aunque a veces aún se perdía, sabía que con valentía y la ayuda de amigos, siempre podría encontrar su camino de vuelta a casa. Y así, vivió muchas más aventuras con León, Jirafa y Elefante, explorando el mundo con alegría y magia, aprendiendo a valorar cada experiencia nueva.

Y colorín colorado, esta historia se ha acabado.

FIN.

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