La Aventura de Yalexi e Iris en España



Era una tarde soleada en Buenos Aires y Yalexi, un niño de diez años, estaba en su habitación leyendo un libro sobre lugares mágicos de Europa. Su hermana Iris, que tenía ocho años, entró curiosa.

"¿Qué lees, Yalexi?" - preguntó Iris, con una mirada intrigada.

"¡Mirá! Este libro habla de España, tiene castillos, playas y hasta dragones de papel" - respondió entusiasmado Yalexi.

"¡Quiero ir!" - exclamó Iris saltando de alegría. "¿Podemos ir a España?".

Yalexi se rascó la cabeza.

"No sé, Iris. Viajar es caro, pero... yo tengo una idea. ¿Qué tal si hacemos un plan para ahorrar dinero?".

"¡Sí! ¡Eso suena emocionante!" - dijo Iris con una sonrisa.

Los dos hermanos comenzaron a pensar cómo podían juntar dinero. Decidieron hacer una venta de limonada y alfajores en el parque de su barrio. Prepararon carteles coloridos y salieron con sus padres para vender.

Durante las primeras horas, las ventas fueron lentas, pero en un momento se acercó un grupo de niños.

"¡Qué ricos se ven esos alfajores!" - dijo uno de ellos.

"Sí, son los mejores de todo el barrio. Están hechos con amor y limón fresco" - añadió Iris riendo.

Los niños compraron limonadas y alfajores, y poco a poco la venta comenzó a despegar. Reunieron una buena cantidad de dinero, pero aún no era suficiente para su viaje.

"Deberíamos hacer algo más" - sugirió Yalexi. "Quizás un espectáculo de marionetas sobre un dragón que vive en España".

"¡Oh, eso sería genial!" - respondió Iris llenándose de energía. "Yo puedo hacer las marionetas de papel".

Los hermanos pasaron días preparando su espectáculo y al fin llegó el día. Invitaron a sus vecinos, amigos y a todos los que habían comprado en su venta de limonada. Con cada función, hacían reír a los niños y recibir aplausos, lo que los motivaba aún más.

Con el éxito del espectáculo, lograron reunir más dinero del que pensaban. La emoción crecía y soñaban cada vez más despiertos.

"Ya casi estamos listos para ir a España" - dijo Yalexi.

"Imaginá ver la Alhambra y crear recuerdos en la playa" - respondió Iris entusiasmada.

Un día, mientras organizaban su próximo espectáculo, se enteraron de un concurso de relatos en la escuela. El primer premio era un viaje a España.

"¡Esto es perfecto!" - exclamó Yalexi. "Debemos escribir un cuento juntos, así tenemos una oportunidad más de ir".

Con determinación, se sentaron a escribir. Hicieron una historia sobre un dragón que quería aprender a cantar flamenco y viajaba desde un mundo de papel. Escribieron noche tras noche hasta que su relato estuvo terminado. El día de la entrega nerviosos pero emocionados, entregaron su cuento.

Unas semanas después, el resultado fue anunciado en la escuela.

"Felicitaciones a Yalexi e Iris por su historia: 'El Dragón Cantor'" - anunció la maestra. "Han ganado el viaje a España".

Ambos hermanos se abrazaron llenos de alegría, mientras sus compañeros aplaudían.

"¡Vamos a España!" - gritó Iris.

"Sí, ¡lo logramos!" - añadió Yalexi, sintiendo que sus esfuerzos valieron la pena.

Finalmente, llegó el día del viaje. En el avión, miraron por la ventana y se prometieron hacer el viaje más increíble de sus vidas. Les contaron a los demás pasajeros sobre su historia y lo que habían hecho para lograrlo.

Cuando llegaron a España, todo era mágico. Vieron castillos, jugaron en la playa, y lo más importante, se sintieron orgullosos de lo que lograron juntos.

"Nunca olvidemos esto, Iris" - dijo Yalexi mientras tomaba una foto del castillo. "El esfuerzo siempre vale la pena, y juntos podemos alcanzar cualquier sueño".

"¡Sí, Yalexi!" - replicó Iris. "¿Quizás nuestro próximo sueño sea viajar por toda Europa?".

Ambos sonrieron, sabiendo que en sus corazones llevaban la valentía de soñar y la fuerza de trabajar juntos para hacerlo realidad.

FIN.

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