La aventura del pequeño colibrí

Había una vez un pequeño colibrí llamado Coco, que vivía en un hermoso jardín lleno de colores. Un día, Coco se despertó con ganas de explorar su hogar. Al volar por el jardín, vio 1 brillante girasol, 2 mariposas amarillas danzando en el aire, 3 hojitas verdes brillando al sol y 4 abejitas zumbando alegres. "¡Qué maravilla hay hoy!"- pensó Coco emocionado.

Coco decidió seguir volando. De repente, mientras pasaba por la flor más alta, vio 5 gotas de rocío resplandeciendo como diamantitos. "¡Hola, gotitas!"- les dijo Coco. Las gotitas respondieron, "¡Hola, pequeño colibrí! ¿Quieres jugar con nosotros?"- Sin pensarlo, Coco dijo: "¡Claro que sí!"- Y empezó a jugar atrapando las gotas con su pequeño pico.

Después de jugar un rato, Coco sintió que era hora de aventurarse un poco más. Salió del jardín y llegó a un bosque mágico. Allí vio 1 hermoso árbol gigante, 2 ardillitas correteando, 3 flores rojas que nunca había visto y 4 pájaros cantando. "¡Qué lugar tan especial!"- pensó Coco. "Voy a hacer nuevos amigos aquí."-

Viento llegó y sopló suave. Coco voló junto al viento y se encontró con 5 globos de colores que flotaban. "¡Hola, globos!"- les saludó. "¿Puedo volar con ustedes?"- Los globos respondieron: "¡Sí, ven a jugar!"- Y juntos volaron alto, sintiendo el sol en sus plumas.

Pero en lo alto, Coco vio algo extraño. Había 1 nube gris, 2 rayos de luz, 3 pajaritos asustados y 4 ramas moviéndose fuertemente. "¿Qué está pasando?"- se preguntó Coco. "Creo que viene una tormenta. ¡Debo avisar a mis amigos del jardín!"-

Rápidamente, Coco voló de regreso al jardín. Cuando llegó, encontró a 1 girasol cabizbajo, 2 mariposas asustadas, y 3 abejitas que zumbaban rápido. "¡Amigos, la tormenta viene!"- dijo Coco. "Debemos refugiarnos. ¡Síganme!"- Todos se pusieron en movimiento.

Coco llevó a sus amigos a bajo un 1 gran árbol, 2 flores que les protegían, 3 hojas que cubrían el suelo y 4 pequeños huecos donde podían esconderse. Cuando la lluvia empezó a caer, todos estaban seguros y arropados. "Gracias, Coco, sos muy valiente!"- dijeron las mariposas. "¡Sí! Gracias por cuidar de nosotros!"- agregaron las abejitas.

Cuando la tormenta terminó, el sol salió brillante. Todos salieron de su refugio y vieron 1 arcoíris hermoso, 2 parejas de aves volando, 3 hojas que bailaban y 4 flores sonriendo. "¡Mirá lo bonito que quedó todo!"- dijo Coco, feliz de ver a sus amigos. "La aventura de hoy fue increíble!"-

Y así, con una sonrisa en su rostro y lleno de nuevas experiencias, Coco el colibrí siguió explorando su jardín y el bosque, disfrutando cada día de las maravillas de su hogar. Y aunque había desafíos, siempre encontraba la forma de ayudar a sus amigos. "¡Qué brillante es la vida!"- repitió Coco una y otra vez.

Y colorín colorado, esta aventura ha acabado.