La batalla por la comida saludable
Había una vez un mundo en el que todo lo que se comía era saludable. Las frutas, las verduras y los granos eran la comida principal de todas las personas y animales.
El agua fresca y pura era la bebida favorita de todos. Pero un día, apareció una bruja malvada llamada Gula, quien decidió introducir alimentos no saludables al mundo.
Comenzó a esparcir su polvo mágico por todas partes, convirtiendo frutas y verduras en golosinas y refrescos azucarados. Los habitantes del mundo comenzaron a comer estas nuevas delicias sin darse cuenta de que estaban perdiendo su salud poco a poco.
Los niños dejaron de jugar afuera y se quedaban sentados viendo televisión todo el día mientras comían dulces. Los animales también se enfermaban porque sus dueños les daban alimentos no saludables. Un día, dos amigos llamados Tomás y Sofía descubrieron el plan malvado de la bruja Gula mientras exploraban el bosque cercano a su casa.
"¡Mira Sofía! ¡Es la bruja Gula!", exclamó Tomás señalando hacia un árbol donde estaba escondida la bruja. "¡Tenemos que detenerla! Ella está arruinando nuestro mundo", dijo Sofía con determinación. Decidieron hacer algo al respecto.
Con coraje y valentía, enfrentaron a la bruja Gula y le pidieron que detuviera su plan malvado. "No puedo parar ahora", dijo Gula con voz temblorosa ante los dos pequeños héroes. "He invertido tanto tiempo en esto".
Pero Tomás y Sofía no se rindieron. Decidieron unirse a la bruja Gula para ayudarla a crear alimentos saludables que fueran igual de deliciosos que los alimentos no saludables. Juntos, crearon nuevas recetas con frutas, verduras y granos enteros.
Hicieron batidos de frutas congeladas, ensaladas coloridas y sándwiches hechos con pan integral. También prepararon postres saludables como helados de yogur y sorbetes de frutas. Pronto, todos en el mundo comenzaron a comer comida saludable otra vez.
Los niños volvieron a jugar afuera y los animales recuperaron su energía. "¡Gracias por ayudarnos!", dijo una abuela sonriente mientras compraba frutas frescas en el mercado local.
"Nos encantó trabajar contigo", dijo Tomás mientras le daba un abrazo amistoso a la bruja Gula. Desde ese día en adelante, el mundo estaba lleno de comida deliciosa y saludable para todos disfrutar. Y Tomás y Sofía aprendieron que siempre pueden hacer una diferencia si trabajan juntos para lograr algo bueno.
FIN.