La bondad de la desconocida
Había una vez, en un pequeño pueblo de Argentina, dos hermanos llamados Tomás y Sofía. Los dos eran muy aventureros y siempre estaban buscando nuevas experiencias.
Un día, decidieron hacer un viaje a Italia con sus padres para conocer la cultura italiana. Pero todo cambió cuando los hermanos se perdieron en las calles de Roma mientras exploraban la ciudad. Se habían alejado demasiado de sus padres y no sabían cómo volver al hotel donde se alojaban.
Tomás estaba preocupado por su hermana menor y no sabía qué hacer. Sofía comenzó a llorar y él trató de consolarla: "-Tranquila Sofi, encontraremos el camino de vuelta".
Caminaron durante horas sin éxito alguno hasta que se encontraron con una mujer mayor que les preguntó si necesitaban ayuda. Los niños explicaron su situación y ella les ofreció llevarlos a su casa para llamar a sus padres.
La señora preparó algo de comida caliente para los niños mientras esperaban a que llegaran sus padres. Les contó historias sobre Roma y les enseñó algunas palabras en italiano. Finalmente, los padres llegaron al hogar de la señora gracias a la ayuda del servicio turístico local.
Todos juntos abrazaron fuertemente a los niños perdidos mientras derramaban lágrimas de alegría. Tomás aprendió una valiosa lección sobre cuidar mejor a su hermana menor e hizo promesa interna nunca más perderla en lugares desconocidos: "-Sofi, te prometo que nunca más te dejaré sola.
"Los niños aprendieron también sobre la bondad humana y cómo pedir ayuda es importante cuando uno está perdido o en problemas. La experiencia que tuvieron juntos los unió aún más como hermanos y les dejó una lección de vida inolvidable.
Desde ese día, Tomás y Sofía recordarían su aventura en Italia con cariño, sabiendo que siempre estarían juntos para superar cualquier obstáculo.
FIN.