La Búsqueda de Julián
Era una noche oscura en el pequeño pueblo de Loma Verde. Julián, un chico aventurero, había desaparecido misteriosamente. Sus amigos, Lucía y Martín, estaban muy preocupados. "¿Dónde estará Julián?"- preguntó Lucía con miedo. "No sé, pero no podemos quedarnos aquí. Debemos buscarlo"- respondió Martín con determinación.
Los dos amigos decidieron ir al bosque, donde habían visto a Julián por última vez. Caminaban con cuidado, iluminando el camino con una linterna. "¿Crees que se haya perdido?"- preguntó Lucía. "Puede ser, o tal vez se aventuró más lejos"- contestó Martín.
Mientras buscaban, escucharon un ruido. Era un susurro en la oscuridad. "¿Escuchaste eso?"- dijo Lucía asustada. "Sí, parece venir de aquel arbusto"- dijo Martín señalando. Se acercaron lentamente. Cuando iluminaron con la linterna, no había nada.
"Quizás Julián estaba jugando alguna broma"- sugirió Lucía intentando calmarse. Pasearon más adentro del bosque, hasta que encontraron una vieja cabaña. La puerta estaba entreabierta. "Vamos a ver"- dijo Martín. Ambos entraron con cautela.
Dentro, encontraron cosas viejas y polvorientas, además de muchas sombras. De repente, en la esquina, vieron una figura. "¡Julián!"- gritaron. La figura se movió rápido y salió corriendo por la puerta. "¡Vamos!"- gritó Martín mientras salían tras él.
Corrieron y corrieron, pero Julián se desvaneció en el aire. La noche se hizo más oscura y un frío extraño los envolvió. "No vamos a rendirnos"- dijo Lucía. "Claro, debemos seguir buscando"- añadió Martín. Con el corazón acelerado decidieron regresar al pueblo y pedir ayuda a los demás.
En el camino de regreso, fueron rodeados por una extraña neblina, y de repente, la risa de Julián resonó en el viento. "¿Estará jugando con nosotros?"- se preguntaron mirando a su alrededor. La búsqueda apenas comenzaba y no sabían si lo volverían a ver, pero se prometieron no dejar de buscar a su amigo. La noche aún guardaba muchos secretos, y el misterio de la desaparición de Julián continuaba.
FIN.