La Búsqueda de los Números Perdidos
En un hermoso bosque lleno de colores y melodías, un día soleado, los animales se reunieron para una gran celebración. Pero, al prepararse, se dieron cuenta de que los números del 1 al 10 habían desaparecido. El astuto zorro, Zico, propuso hacer una búsqueda para encontrarlos.
"- ¡Amigos! Necesitamos reunirnos y encontrar los números perdidos!", exclamó Zico, meneando su cola con entusiasmo.
"- ¿Por qué son tan importantes?" - preguntó la tortuga Tula, con curiosidad.
"- Sin los números, no podemos contar para nuestra fiesta. ¡No habrá ni torta ni regalos!", respondió Lila, la pequeña ardilla, ansiosa por celebrar.
Así que 15 animales, desde los más pequeños hasta los más grandes, decidieron unirse a la aventura: Zico el zorro, Lila la ardilla, Tula la tortuga, Pancho el pato, Ciri la cierva, Roco el conejo, Berta la búho, y otros más, como Pipo el pez, Niko el jabalí, y muchos más.
Mientras avanzaban por el bosque, Roco, el conejo, se detuvo en seco. "- ¡Esperen! ¡Escucho algo!". Entonces, todos se callaron y escucharon el suave murmullo del agua. Decidieron acercarse al río, donde se encontraron con Pipo el pez.
"- ¡Hola, amigos! ¿Qué los trae por aquí?", preguntó Pipo al ver a todos reunidos.
"- Estamos buscando los números del 1 al 10. ¿Los has visto?", respondió Lila.
"- Creo que vi al número 1 nadando cerca de la roca grande", dijo Pipo rápidamente.
"- ¡Vamos a buscarlo!", dijo Zico, llevándolos rápidamente hacia la roca. Pero solo encontraron al travieso Rambo, el reno, que estaba jugando cerca.
"- No he visto a los números, pero puedo ayudar. Vamos a buscar juntos", ofreció Rambo con energía.
Continuaron su búsqueda, cruzando el bosque, cuando de repente, encontraron a Ciri la cierva, que parecía preocupada. "- Chicos, he visto al número 4 atrapado en matorrales. ¡Vengan rápido!".
Corrieron hacia donde Ciri había indicado y efectivamente, allí estaba el número 4, atrapado entre ramas espinosas. Todos se pusieron a trabajar juntos, cada uno usando su talento para liberar al número. Tula utilizó su caparazón para proteger a los otros mientras los más fuertes, como Roco y Zico, movían las ramas.
Finalmente, después de un gran esfuerzo, lograron liberar al número 4. "- ¡Gracias, amigos!", exclamó, saltando de alegría.
"- ¡Uno menos!", gritó Lila mientras hacían un brindis con bayas dulces que habían encontrado. Pero había más números perdidos. Se dirigieron a la colina que daba vistas al bosque.
Al llegar, descubrieron que el número 7 estaba sobre un árbol alto. "- ¡Yo puedo ayudar!", dijo Berta, la búho. "- Tengo una buena vista desde las alturas". Viajó hacia la cima del árbol y, después de unos instantes, regresó con el número 7. "- ¡Lo encontré!".
Pero ya era tarde, y el sol empezaba a ocultarse. Todos estaban cansados y comenzaban a perder la esperanza.
"- Quizás deberíamos dejarlo para mañana", sugirió Pancho, el pato, mientras todos se sentaban alrededor de una fogata.
Justo cuando la tristeza comenzaba a llenar el aire, Niko el jabalí gritó: "- ¡Espera! No hemos buscado en el claro de flores! Hay historias de que los números a veces se esconden allí. ¡Vamos!". Con renovada energía, todos se levantaron y caminaron hacia el claro.
Cuando llegaron, los colores del lugar eran impresionantes y, entre las flores, había luces brillantes. Al acercarse, se dieron cuenta de que el número 2 y el número 5 estaban jugando entre los pétalos. "- ¡Gracias por encontrarnos!", dijeron los números juntos.
Finalmente, después de muchas risas y aventuras, lograron encontrar todos los números: el 3 estaba en una roca, el 6 junto a un árbol hablando con un abejorro, el 8 danzaba con las mariposas, el 9 y el 10 se habían escondido detrás de unos arbustos.
Cuanto más buscaban, más descubrieron sobre ellos mismos, y aprendieron que, juntos, eran más fuertes. Con alegría y felicidad, los números volvieron a su lugar, y la celebración fue maravillosa.
"- Aprendimos una gran lección hoy", dijo Tula al final. "- Cuando trabajamos juntos, cualquier cosa es posible". Y todos se rieron y celebraron juntos, agradecidos por la amistad y la aventura.
FIN.