La búsqueda del bosque encantado
Había una vez en un bosque encantado, un oso llamado Pedro que era muy curioso y aventurero. Un día, mientras exploraba el bosque, encontró a dos niñas llamadas Emma, quienes estaban buscando su castillo de princesas perdido.
"Hola Oso Pedro, ¿puedes ayudarnos a encontrar nuestro castillo de princesas?" - preguntó Emma emocionada. "¡Por supuesto!" - respondió Oso Pedro con una sonrisa en su rostro. Juntos comenzaron la búsqueda del castillo perdido.
Mientras caminaban por el bosque, se encontraron con el astronauta Buzz Lay quien había aterrizado en su nave espacial cerca del lugar donde estaban. "Hola amigos ¿qué hacen por aquí?" - preguntó Buzz Lay curioso.
"Estamos buscando el castillo de las princesas" - dijo Emma emocionada. Buzz Lay decidió unirse a la búsqueda y juntos continuaron explorando.
Después de unas horas de caminar, llegaron a un hermoso lago rodeado de flores perfumadas donde se encontraba toda la familia de Emma haciendo un picnic. "¿Qué están haciendo aquí?" - preguntó sorprendida Emma al verlos allí. "Decidimos venir a pasar el día juntos" - explicó su mamá sonriendo. Todos decidieron acompañarlos en la búsqueda del castillo perdido.
Finalmente lo encontraron escondido detrás de unos arbustos y todos quedaron maravillados al ver lo hermoso que era. Pero entonces algo inesperado pasó: descubrieron que dentro del castillo había una fábrica que contaminaba el bosque y los ríos cercanos.
Emma estaba muy triste porque amaba la naturaleza y sabía que esto era malo para ella. "¡No podemos permitir que sigan contaminando nuestro hogar!" - exclamó Emma determinada. Todos juntos decidieron hacer algo al respecto.
Buzz Lay usó su nave espacial para llevar a todos los contaminantes lejos del bosque, mientras que Oso Pedro demostró su astucia para cerrar la fábrica de forma segura.
Finalmente, la familia de Emma decidió quedarse en el bosque y ayudar a cuidarlo día tras día. Todos se dieron cuenta de lo importante que es proteger nuestro hogar y prometieron hacer todo lo posible para mantenerlo limpio y seguro.
Y así, gracias a su valentía y amor por la naturaleza, nuestros amigos lograron salvar el bosque encantado y vivieron felices para siempre.
FIN.