La búsqueda del tesoro en el jardín Rayito de Sol



Había una vez en el jardín de infantes "Rayito de Sol", un grupo de niños muy especial formado por Sofi, Benja, Martina, Juan y Lautaro. Todos estaban emocionados por comenzar una nueva historia llena de aventuras y travesuras.

La maestra Ana era muy cariñosa y siempre les contaba cuentos maravillosos que despertaban la imaginación de los pequeños. Un día, les habló sobre un tesoro escondido en el patio del jardín.

Los ojos de los niños se iluminaron con emoción al escuchar la noticia. - ¿Un tesoro? ¡Qué genial! - exclamó Sofi emocionada. - Sí, y para encontrarlo tendrán que superar desafíos y trabajar en equipo - les explicó la maestra Ana.

Los niños se organizaron rápidamente en grupos para buscar pistas que los llevaran al tesoro escondido. Recorrieron cada rincón del patio, resolviendo acertijos y enfrentando pruebas divertidas como saltar como ranitas o imitar animales.

- ¡Miren lo que encontré! - gritó Benja mientras levantaba un papel con una pista. Siguiendo las indicaciones del papel, llegaron al arenero donde desenterraron un cofre lleno de monedas de chocolate y stickers brillantes. Los niños celebraron su hallazgo con risas y alegría.

Pero la aventura no había terminado aún. La maestra Ana les propuso crear un mural gigante con todas las cosas bonitas que habían encontrado durante su búsqueda del tesoro.

Los pequeños se pusieron manos a la obra, pintando dibujos coloridos y pegando sus tesoros en el mural. - ¡Qué lindo nos quedó! - exclamó Martina orgullosa del trabajo en equipo.

Al finalizar la jornada, los padres fueron a buscar a sus hijos y quedaron sorprendidos al ver el hermoso mural lleno de colores y creatividad. Los niños explicaron entusiasmados cada detalle de su aventura en busca del tesoro perdido.

Desde ese día, Sofi, Benja, Martina, Juan y Lautaro se convirtieron en grandes amigos inseparables, listos para vivir nuevas historias llenas de diversión y aprendizaje en el jardín "Rayito de Sol". Y así continuaron disfrutando juntos de su infancia llena de magia e imaginación, construyendo recuerdos inolvidables que guardarían por siempre en sus corazones.

FIN.

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