La búsqueda mágica del equipo real

Había una vez en un reino lejano, donde vivían princesas y ogros. En ese lugar mágico, también habían magos que controlaban los elementos naturales.

Los chicos de cuarto grado A estaban muy emocionados por escribir una historia con muchos finales diferentes y decidieron incluir a dos grandes futbolistas argentinos en la trama: Lionel Messi y Ángel Di María. La historia comenzaba cuando el reino estaba en peligro debido a un hechizo lanzado por un malvado mago.

La única forma de romper el hechizo era encontrar tres objetos mágicos que se encontraban escondidos en lugares diferentes del reino. La princesa Ana, quien era muy valiente, decidió buscar los objetos junto con su amigo ogro, Tomás.

Ellos sabían que no podrían hacerlo solos, así que buscaron ayuda de Lionel Messi y Ángel Di María. "Hola chicos", dijo Ana al ver a los futbolistas llegando al castillo. "Necesitamos su ayuda para salvar nuestro reino. ""Por supuesto", respondió Messi.

"Somos todo oídos. "Juntos planearon cómo encontrar los objetos mágicos. El primer objeto estaba escondido dentro de una cueva llena de trampas mortales.

Luego de sortear todos los obstáculos gracias a las habilidades atléticas de Messi y Di María, lograron obtener el objeto. El segundo objeto estaba protegido por un dragón gigante que escupía fuego sin parar.

Pero Tomás demostró ser más fuerte e inteligente de lo que parecía al derrotar al dragón con sus habilidades ogrescas. Finalmente, el tercer objeto estaba en manos del malvado mago que había lanzado el hechizo. A pesar de que era un poderoso mago, no podía competir contra la fuerza de los cuatro amigos trabajando juntos.

Después de recuperar los objetos mágicos, regresaron al castillo para romper el hechizo y salvar el reino. "¡Lo logramos!", gritó Ana mientras abrazaba a sus amigos. "Gracias a todos ustedes. ""No hay problema", respondieron Messi y Di María al unísono.

"Fue un placer ayudar. "Los chicos se dieron cuenta de que trabajar juntos como equipo fue lo que les permitió superar cada obstáculo en su camino hacia la victoria.

Y así, aprendieron una valiosa lección sobre la importancia del trabajo en equipo y la amistad. Desde ese día en adelante, siempre recordaron esa aventura emocionante con cariño y se inspiraron mutuamente para seguir trabajando duro y lograr grandes cosas juntos.