La cabaña en el bosque



Había una vez dos hermanos, nena y nene, que vivían en un pequeño pueblo rodeado de montañas. Un día, mientras jugaban cerca del río, se adentraron demasiado en el bosque y se perdieron.

Nene intentó encontrar el camino de regreso a casa pero no lo logró. Ya era tarde y la noche comenzaba a caer. Nena estaba asustada y lloraba sin control. - ¿Qué vamos a hacer? ¿Cómo volveremos a casa? - preguntó Nena con voz temblorosa.

- No lo sé... pero no te preocupes, encontraremos una solución- dijo Nene tratando de mantener la calma. Caminaron por horas hasta que llegaron a una cueva donde decidieron pasar la noche.

Allí hicieron un fuego improvisado con ramitas y hojas secas. Compartieron sus pocas provisiones y se arroparon juntos para dormir. A la mañana siguiente, después de reagarrar algunas frutas silvestres del bosque, continuaron su búsqueda para encontrar el camino de vuelta a casa.

Sin embargo, cuanto más caminaban más se alejaban del pueblo. Después de varios días caminando sin rumbo fijo, los hermanos estaban agotados y hambrientos. Fue entonces cuando vieron algo que les dio esperanza: una cabaña abandonada en medio del bosque.

Se acercaron cautelosos pero al ver que no había nadie dentro decidieron entrar para resguardarse del frío invierno que se avecinaba. Dentro encontraron algunas herramientas y utensilios abandonados que les permitieron construir un refugio más cómodo donde podrían pasar las noches.

Aprendieron a cazar y pescar para alimentarse y a recolectar leña para mantener el fuego encendido. Los días se convirtieron en semanas, las semanas en meses y los hermanos aprendieron mucho sobre la vida en el bosque.

Se hicieron expertos cazadores, pescadores y recolectores. Un día, mientras caminaban cerca del río que les había llevado hasta allí, encontraron un mapa del pueblo con una nota que decía "para quien lo encuentre".

Al leerlo comprendieron que habían estado caminando en la dirección equivocada todo este tiempo. Con el nuevo conocimiento que obtuvieron del mapa, regresaron al pueblo después de varios días de caminar.

Cuando llegaron, fueron recibidos con abrazos por sus padres quienes habían estado buscándolos desesperadamente desde su desaparición. Nena y Nene contaron toda su aventura y cómo lograron sobrevivir gracias a su ingenio y perseverancia. Todos quedaron asombrados por su valentía e inteligencia.

A partir de ese momento, Nena y Nene se convirtieron en héroes locales y fueron admirados por todos los habitantes del pueblo. Pero lo más importante es que aprendieron una gran lección: nunca rendirse ante la adversidad porque siempre hay una solución si uno tiene suficiente coraje para encontrarla.

FIN.

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