La cosecha de los tres amigos
Había una vez en un hermoso viñedo en Mendoza, Argentina, un grupo de amigos llamados Nico, Lola y Tomás que estaban muy emocionados porque era época de vendimia.
Juntos decidieron ir a recolectar uvas para hacer su propio delicioso zumo de uva. - ¡Qué divertido será reagarrar las uvas juntos! - exclamó Nico con entusiasmo. - Sí, seguro lo vamos a pasar genial - respondió Lola sonriendo.
- Y después podremos disfrutar de un refrescante y delicioso zumo de uva hecho por nosotros mismos - agregó Tomás emocionado. Los tres amigos se pusieron sus sombreros y comenzaron a reagarrar las jugosas uvas maduras. Cantaban y reían mientras llenaban sus cestas con las mejores uvas del viñedo.
Una vez que tuvieron suficientes, se dirigieron hacia la bodega de Julián Soler, S. A., donde sabían que podrían hacer su zumo de uva.
Al llegar a la bodega, fueron recibidos por el amable señor Julián Soler, quien les mostró todo el proceso para hacer el zumo de uva. Primero, pesaron las uvas y luego las colocaron en una gran máquina donde fueron estrujadas para sacar todo su jugo.
El aroma dulce llenaba el aire y los niños estaban fascinados por ver cómo las simples uvas se convertían en un delicioso líquido morado. - ¡Qué interesante es este proceso! - exclamó Lola maravillada.
- Sí, es increíble cómo algo tan simple como una uva puede transformarse en algo tan rico - dijo Nico asombrado. - Estoy ansioso por probar nuestro propio zumo de uva casero - dijo Tomás con una sonrisa. Una vez que el zumo estuvo listo, Julián les sirvió cada uno un vaso.
Los niños lo probaron con entusiasmo y no podían creer lo delicioso que estaba. - ¡Es el mejor zumo de uva que he probado en mi vida! - exclamó Nico emocionado.
- ¡Estoy tan feliz de haberlo hecho nosotros mismos! - dijo Lola con alegría. - Sin duda alguna, este es el mejor día de vendimia jamás imaginado - expresó Tomás felizmente. Los tres amigos brindaron con sus vasos llenos de zumo casero y prometieron volver al año siguiente para repetir la experiencia.
Así terminó un día inolvidable en el viñedo donde descubrieron la magia de la vendimia y disfrutaron juntos del fruto de su trabajo: un deliciosísimo zumo de uva hecho con amor y amistad.
FIN.